La formación del mexicano de hoy implica grandes retos que deben enfrentarse con un modelo educativo sustentado en lo dispuesto en el artículo 3º constitucional, garantizando su derecho a recibir educación de calidad, gratuita y que permita la mejor convivencia humana, con el fin de fortalecer el aprecio y respeto por la diversidad cultural, la dignidad de la persona, la integridad de la familia, la convicción del interés general de la sociedad, los ideales de fraternidad e igualdad de derechos de todos.
Con esta premisa, Emilio Troncoso Acosta, profesor de educación básica del Distrito Federal, presentó en el primer Foro de Educación Básica la ponencia “Los grandes retos de la Educación Básica”, donde indica que es indispensable que los alumnos egresen de educación básica con procesos bien firmes de comprensión lectora, el desarrollo de habilidades matemáticas que le permitan resolver problemas concretos e iniciar un proceso permanente de alfabetización científica en las escuelas, despertando el interés y el gusto por la ciencia, desarrollando las habilidades necesarias para construir un pensamiento crítico.
Concluye que es urgente replantear nuestra política educativa con la finalidad de formar individuos con los conocimientos, habilidades y destrezas que les permita enfrentar una realidad actual en donde la competitividad es el común a nivel mundial y el aprendizaje permanente es una exigencia para mantenerse vigente en un mundo de constantes interacciones donde no es posible mantenerse al margen de la dinámica de una sociedad globalizada.