“Trascendemos al enseñar porque de las aulas, laboratorios o pasillos saldrán los profesionistas, científicos, humanistas y ciudadanos que serán el futuro. Ustedes, con su vida, han labrado el futuro y con ello, de alguna manera, han tocado la eternidad, porque un maestro afecta la eternidad, nunca se sabrá dónde termina su influencia”, afirmó Enrique Graue.
La educación es el camino para que el mundo que es, y el que debería ser, se vuelvan uno mismo, y para ello, los maestros son actores fundamentales de esta tarea, afirmó el Rector de la UNAM,durante los festejos del Día del Maestro.
La ceremonia del Día del Maestro, resaltó el universitario, es una muestra de la gratitud que alumnos, académicos, trabajadores e investigadores tienen hacia los maestros por su trabajo y dedicación.
Previamente, en la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, se reconoció a 59 académicos con más de 50 años de labor docente, y también se galardonó a los profesores e investigadores eméritos Jorge Daniel Carlos Cantó Illa, Alejandro Frank Hoeflich, Serafín Joel Mercado Doménech y Rachel Mata Essayag.
A través de sus maestros, la UNAM, constructora de paz
A nombre de la Universidad, la abogada General, Mónica González Contró, agradeció el trabajo constante, paciente y honesto de los maestros, el cual contribuye al bien común y es una forma en la que la UNAM retorna al país lo mucho que ha recibido de éste.
Su labor, subrayó, es aún más importante en el mundo globalizado, donde los jóvenes tienen diferentes significados de las fronteras; los avances tecnológicos han traído nuevas marginaciones y, adicionalmente, en la nación hay pérdida de credibilidad en las instituciones, debilitamiento del Estado de derecho, inseguridad y corrupción.
“En estas circunstancias, se torna más compleja la labor del docente, pero también más estimulante. En la educación está el poder transformador de la sociedad; en el conocimiento, las ciencias, las humanidades, la cultura y las artes podemos encontrar las claves para el progreso, así como para la sana y respetuosa convivencia humana”.
La Universidad, a través de sus maestros, está llamada a transmitir que la relación humana no está en el poseer, sino en aportar a nuestro tiempo lo mejor de nuestras capacidades y ser constructores de esperanza y paz, destacó.
A nombre de los profesores e investigadores eméritos, Rachel Mata Essayag, de la Facultad de Química, expresó que reciben las distinciones con la humildad de quien cree que sólo cumplió con su deber.
La UNAM, añadió, les ha permitido comunicar y crear, ser un espacio de encuentro libre y directo con estudiantes y más maestros, que se ha traducido en conocimiento y progreso para el país.