La participación de la sociedad y de los padres de familia es necesaria para mejorar la educación en México, señaló el consejero presidente del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Eduardo Backhoff Escudero.
En un sistema tan complejo como el educativo y tan grande y diverso como el mexicano, se requiere la articulación de todo el entramado administrativo y de los mecanismos para que la participación social forme parte de la toma de decisiones, afirmó.
Durante su participación en el simposio Modelo Educativo 2017. Hacer posible la Reforma curricular: Liderazgo, Gestión Escolar y Gobernanza, organizado por la Fundación Santillana, Backhoff Escudero señaló que la sociedad exige mayor rendición de cuentas y participación en las decisiones públicas. En educación la participación de la sociedad y de los padres de familia es un imperativo, señaló.
Dijo que la Reforma Educativa requiere no solo de condiciones de legalidad sino de legitimidad que haga posible su viabilidad, así como de la participación de los principales actores educativos. Requiere, además, identificar los focos rojos que podrían interferir en su implementación. Entre estos últimos identificó a integrantes de las burocracias, federal y estatales, así como a secciones sindicales que la interrumpen porque han visto trastocados sus intereses.
En la mesa de diálogo Gobernanza del Sistema Educativo, Backhoff Escudero consideró que para la implementación de una reforma educativa se requiere de un diagnóstico, del establecimiento de políticas claras y de un componente que evalúe sus efectos.