Por Mariana Jaime
En reacción a la iniciativa de reforma constitucional en materia educativa que eliminaría al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), consejeros del organismo ofrecieron una rueda de prensa para fijar su postura.
La presidenta de la Junta de Gobierno, Teresa Bracho González, acompañada de los consejeros Patricia Vázquez del Mercado, Sylvia Schmelkes del Valle y Bernardo Naranjo Piñera, sostuvieron que el Sistema Educativo Nacional requiere de un órgano autónomo para evaluar todos los componentes y a partir de ello generar y difundir información pertinente, objetiva y confiable para la sociedad y autoridades educativas.
Bracho González insistió en que la autonomía es indispensable en el proceso de reducción de las brechas de inequidad que caracterizan al Sistema Educativo Nacional, sin rechazar la propuesta de generar un sistema permanente de formación y actualización para los docentes ni la creación de nuevas políticas para evitar la deserción y fomentar la permanencia.
“La propuesta de eliminar un organismo autónomo como el INEE, representa un atentado de nuevo Gobierno contra el sistema de pesos y contrapesos de nuestra democracia, y en particular contra los órganos constitucionales autónomos. Esta separación y equilibrio de poderes es fundamental para el adecuado funcionamiento del estado democrático”, sentenció la presidenta de la Junta de Gobierno.
De concretarse la desaparición del organismo, Bracho González señaló que sería el Ejecutivo quien decida lo que sucederá con toda la estructura, sin embargo, en tanto no se conozaca la iniciativa oficial y no se den las modificaciones planteadas, la Junta de Gobierno continuará cumpliendo con su mandato y se mantendrán en defensa de la institución, cuya labor se ha construido a lo largo de 16 años.
El Instituto manejó este año un presupuesto mil 200 millones de pesos, mientras que el solicitado para 2019 no alcanza los mil millones. Actualmente en él laboran alrededor de 800 personas.