Wenceslao Vargas Márquez
No han sido pocas las veces en que el Presidente López Obrador se ha referido a su gobierno y a su funcionamiento como el desempeñado por un elefante reumático.
La frase original se atribuye a Jesús Reyes Heroles, el último doctrinario del PRI, quien dijo, sólo de la SEP, que esa secretaría era un elefante reumático. Hoy, el presidente pide insistentemente ayuda al respetable para hacer caminar al elefante que es el gobierno. El último jalón de orejas de parte del presidente al elefante reumático que es su equipo de trabajo ocurrió en Chiapas hace unas horas al consultar si ya habían llegado las becas Benito Juárez a las preparatorias. Le corearon los alumnos que no, y puso enseguida un tache más al elefante reumático, al elefante reumático que no se mueve.
El jueves 16 de mayo, el mismo día en que entró en vigor la reforma educativa 2019 pudimos solicitar la intervención del senador Rubén Rocha Moya y del secretario técnico de la Comisión de Educación del Senado, Ángel Nava, para resolver los casos de la lista de agraviados de Veracruz. Tienen la plena disposición. Pudimos también hacer un recorrido por la SEP CdMx, una de sus subsecretarías (la de Educación Media Superior, SEMS por sus siglas), y dos de sus unidades administrativas (Uemstis). Nadie sabe que harán con los casos de ceses, reinstalaciones, y desistimientos de las demandas laborales que empujaron Peña Nieto, Chuayffet y Aurelio Nuño, todos del PRI. La actual palabra presidencial está empeñada en deshacer los agravios del pasado gobierno de ladrones que tanto humilló al magisterio con la complicidad del CEN del SNTE y sus secciones, quienes callaron durante 2013-2018 a cambio de una lana, a cambio de una corta feria; la palabra presidencial está empeñada pero el elefante no se mueve.
Ante la doble abstención del CEN del SNTE y su supuesta contraparte Maestros por México MxM, hicimos saber a algunos funcionarios el día 16 de mayo que el camino está en el nuevo marco legal. Se trata de abordar los temas que el SNTE permitió a cambio de dinero: permitió y aplaudió los ceses, las demandas laborales, los desplazamientos, las suspensiones de pago. Hoy, resolver los desplazamientos y suspensiones de pago es de lo más simple, son decisiones fácilmente ejecutables siempre y cuando el secretario Moctezuma centre su energía en el punto y dé las indicaciones del caso. Hasta ahora eso no existe, prevalece el reumatismo: no hay cronograma ni intenciones de ejecutar sobre todo de parte de los funcionarios que el PRI dejó enquistados en los mandos medios e inferiores de la secretaría. Pongo tres nombres: Erick López Álvarez Tostado, Tomás Chávez Nava y Fidel Mosqueda Camacho, los tres de la Uemstis, los tres empeñados en que fracasen tanto el presidente como el secretario Moctezuma. Espero la triple réplica y por supuesto, la continuidad de las represalias, pero hay que decirlo.
En cuanto a los ceses y las demandas laborales las nuevas disposiciones permiten un camino despejado. Acerca de las demandas laborales ya hay una indicación en el inciso d) del Memorándum presidencial del 16 de abril. Dice a la letra: “La Secretaría de Gobernación realizará las diligencias y acciones necesarias para poner en libertad a la brevedad a maestros y luchadores sociales que todavía se encuentren en prisión por haberse opuesto a la susodicha reforma o por haber participado en otras causas sociales justas, así como a retirar las imputaciones legales formuladas por instancias del gobierno federal para castigar activismos pacíficos en lo político, social, laboral, ambiental, agrario y en defensa del territorio”. ¿Se necesita más claridad? No. Lo único que se necesita es que alguien mueva al elefante y está claro que no serán ni el SNTE ni su supuesta oposición titulada Maestros por México, MxM.
Acerca de cualquier tipo de cese que hubiese sido fundamentado en la infausta Ley General del Servicio Profesional Docente la nueva legislación del 15 de mayo dice en los artículo transitorios lo siguiente. “Segundo. A partir de la entrada en vigor de este Decreto se abroga la Ley General del Servicio Profesional Docente, se derogan todas las disposiciones contenidas en las leyes secundarias y quedan sin efectos los reglamentos, acuerdos y disposiciones de carácter general contrarias a este Decreto”; “Tercero. Quedan sin efectos los actos referidos a la aplicación de la Ley General del Servicio Profesional Docente que afectaron la permanencia de las maestras y los maestros en el servicio”. ¿Se necesita más claridad? No. Lo único que se necesita es que alguien mueva al elefante. Conclusión:
Para revertir los ceses que aplicaron Peña Nieto, Chuayffet y Nuño, sólo hay que aplicar los artículos segundo y tercero del decreto del 15 de mayo; para retirar imputaciones legales, salidas del mismo PRI-2013-2018, sólo hay que aplicar el inciso d) del Memorándum presidencial del 16 de abril. ¿Se necesita algo más? Nada, sólo que la SEP, acatando las órdenes presidenciales, se decida, por fin, a mover enérgicamente a su elefante.
Twitter @WenceslaoXalapa