Durante la inauguración de la Cumbre de Líderes en Acción por la Educación, CLASE 2016: Transformemos el Aprendizaje, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), afirmó que la implementación de la reforma educativa tiene una alta dosis política, y aunque es muy importante que cada vez se discutan más los temas pedagógicos, lo que quiere decir que se avanza por el camino correcto.
En este sentido, explicó que el sistema educativo que se tenía carecía de calidad, por lo que requería un cambio muy profundo en todos los aspectos, “para ayudar a los maestros; mejorar organización e infraestructura de las escuelas, y tener una mejor pedagogía, para que el sistema no reproduzca la desigualdad, sino sea un instrumento para romperla.”
A través de una buena educación, los niños y niñas de familias con menos oportunidades tendrán las habilidades y los conocimientos para romper con esa desigualdad, y poder tener una mejor vida de la que tuvieron sus padres.
Con estos cambios, explicó, la reforma busca que los maestros avancen a través de concursos y promociones, y no por reglas opacas.
Adicionalmente, detalló que ese cambio busca contar con mejores maestros, y acabar con los vicios del sistema altamente corporativo y clientelar que carecía de reglas claras para que los docentes basaran su carrera en el mérito.
“Con la Reforma Educativa se atenderán más de 33 mil planteles, a través del programaEscuelas al CIEN, con lo que se avanzará para sacar de algún tipo de rezago a más o menos la mitad de los planteles que no tienen agua, luz o baños, o están muy deteriorados.”, dijo.
Finalmente, el funcionario se refirió al nuevo Modelo Educativo, a través del cual se busca que los niños no sólo acumulen conocimientos, sino que aprendan a aprender, razonar y discernir, y sean capaces de generar hipótesis, así como desarrollar sus habilidades socioemocionales para que a través de la educación puedan realizar sus sueños y ser felices.