En Guerrero, padres de familia han decidido no enviar a sus hijos a la escuela por miedo a los hechos de violencia e inseguridad que han afectado a diversas regiones.
Según información publicada por el diario Reforma, padres de la escuela primaria “Leona Vicario” de la Colonia Fovissste de Acapulco, reportan que cerca de la escuela circulan frecuentemente autos con personas armadas pese a la presencia de militares.
Mediante un escrito que envían a la supervisora de la zona escolar 059, Rosa Emilia Fragosa Mendoza, relatan que el martes 8 de diciembre a las 16:00 horas, elementos de la Gendarmería persiguieron a sujetos armados en un hecho que, se afirma, terminó con un saldo de muertos y heridos. Y que después, a las 17:40 de ese mismo día, hubo otra persecución entre hombres armados de grupos antagónicos.
“En virtud de esa situación se tomó la decisión de que a partir de este jueves ya no enviarán a sus hijos a la escuela”, relata el diario.
No hay horario para vivenciar ese tipo de problemas que consternan a la colonia y hacen vulnerable al espacio escolar para que nuestros niños tomen clases.
Al respecto, la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación del Estado de Guerrero (CETEG) señala que en Acapulco, en cuando menos 300 escuelas de preescolar, primaria y secundaria sufren problemas de inseguridad.
Finalmente, el secretario general de esta organización magisterial, Reyes Ramos Guerrero, afirmó que en la asamblea estatal que se desarrolló en sus instalaciones, se informó que maestros de preescolar y de primaria que tienen sus centros de trabajo en Acapulco y en las comunidades de este municipio, acordaron suspender las labores docentes por los problemas de inseguridad.