Los resultados del Plan Nacional para la Evaluación de los Aprendizajes Medio Superior (Planea MS) revelan “que el sistema educativo no está funcionando a la altura de lo que se requiere que logre y en ello tienen que ver muchas prácticas que han sido fomentadas por el propio sistema, desde hace muchas décadas”, asegura Juan Fidel Zorrilla Alcalá, especialista en Sociología de la Educación.
En entrevista con Educación Futura, el investigador del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explica que Planea MS ha puesto de manifiesto dos grandes tipos de problemas: los que tienen que ver con el funcionamiento del sistema educativo y los educativos. Los dos “redundan en la alta proporción de estudiantes que tienen estos niveles tan precarios de logro escolar”.
Uno de los problemas que tiene que ver con el sistema educativo es la corrupción: “en la Educación Media Superior pública, los estudiantes con mucha frecuencia se enfrentan a la corrupción, los profesores les demandan que adquieran cd, usb, apuntes impresos, que compren boletos para ir a funciones de actividades culturales, de teatro, que son actividades irregulares y que derivan en la obtención de recursos lícitos por parte de muchos profesores, esta práctica infortunadamente es muy frecuente, es una experiencia que debe desterrarse, en definitiva, del sistema educativo porque ha venido creciendo y tienen una dimensión muy grande”.
Entre los problemas educativos, el integrante del Sistema Nacional de Investigadores, señala que:
“no hemos sabido enfocarnos en estas habilidades que son absolutamente indispensables, hoy en día, se les reconoce como habilidades básicas universales, que son lenguaje y comunicación, el dominio de la lectura y la escritura argumentativa, estos dos componentes no están suficientemente practicados, ni identificados, ni en los programas, ni en las prácticas escolares, eso es una gravísima deficiencia que tienen las practicas y programas de las materias, no están enfatizando los programas lo suficiente”.
La consecuencia es que muchos estudiantes pueden atravesar el bachillerato sin leer ningún texto formal, “solo con apuntes y actividades que presenta el profesor y con textos muy cortos que se escogen ad hoc para hacer ejercicios muy elementales y rudimentarios, que no son suficientes para el desarrollo de las capacidades intelectuales que se requieren en el mundo moderno”.
Este problema no es exclusivo del bachillerato, se comparte con de la educación básica, aunque Zorrilla reconoce avances en ese sector, pero advierte que también es un problema presente en la Educación Superior.
Estos factores dan lugar a “un reto multifactorial”, por un lado terminar con la corrupción y por el otro “la formación de profesores y que las prácticas y programas didácticos se enfoquen al desarrollo de estas habilidades básicas universales que están detectadas correctamente en esta prueba y que no se están atendiendo debidamente”.
El caso de Oaxaca
El graduado de la Universidad de Manchester, Inglaterra, afirma que debe hacerse una revisión radical de la organización y funcionamiento del sistema educativo, prueba de ello es lo ocurrido en Oaxaca “recientemente hemos tenido oportunidad, en México, de ver como en un estado, Oaxaca, el sistema educativo venía funcionando de manera muy precaria, esto se debió al tipo de relación que se estableció institucionalmente entre el gremio y las autoridades educativas –federales y estatales–, yo creo que el caso de Oaxaca no es tan extraordinario como pudiera creerse, sino que es un caso extremo, de un patrón que esta presente en México”.
La importancia de las pruebas
La opinión de Juan Fidel Zorrilla es muy distinta a la mayoría de académicos que critican la realización de este tipo de pruebas:
” yo creo que se viene a reivindicar la importancia de estas pruebas, hay muchos colegas que, en el ámbito de la comentocracia, que en el ámbito de la Educación Superior, son muy críticos de la evaluación, yo creo que este tipo de pruebas viene a mostrar lo útiles que son para recordarnos que tenemos la obligación, no solo de dar cobertura a los jóvenes, sino que, una vez que ingresan a la escuela, que las experiencias que se les ofrece para desarrollarse sean de calidad. El derecho no sólo es a la educación, sino a una educación de calidad, estos datos nos están mostrando que la educación a la que tiene acceso la población no es de calidad”.
Los resultados no deberían sorprendernos
Sobre los resultados, el académico universitario, considera que no deberían de sorprendernos, por lo que ya sabíamos de PISA, “son congruentes con esos resultados”, aunque también son muy preocupantes. “Por PISA ya sabíamos que los resultados en lengua y matemáticas son muy precarios, inadecuados para lo que uno tendría que esperar en el mundo contemporáneo, para estudiantes de 15, 16 años”.
Los resultados son ilustrativos del estado en que se encuentra el funcionamiento del sistema educativo, considera Zorrilla y señala que el hecho de que los alumnos acrediten o pasen una materia no es equivalente a que adquieran el conocimiento, como lo demuestra la prueba.
El efecto del DF es muy grave
Si bien los resultados de Planea MS muestran un problema muy serio en todo el país, “en el DF ha adquirido connotaciones muy fuertes, el efecto del DF es muy grave”, considera el Doctor en Sociología.
Zorrilla aborda el caso de dos entidades con muy alta a cobertura y que son muy distintas entre si: Nuevo León y el Distrito Federal:
“ya sabíamos que tenían datos muy malos sobre retención de estudiantes en la Educación Media Superior y tasas de abandono altísimas, aunque son estados con un mayor nivel de vida, con mayor capital cultural, con mayor cobertura, tienen un funcionamiento muy inadecuado y ya se había detectando esto desde antes, tampoco nos debiese de sorprender tanto, ya había focos rojos prendidos desde esos datos”.
“Uno quisiera que los resultados fueran mejores, uno esperaría que en las entidades donde hay mayor cobertura y mayor capital cultural, pues hubiera mejores resultados y no los que se obtuvieron, es una llamada de atención sobre la necesidad de revisar como funciona la escuela”, finaliza Juan Fidel Zorrilla.