Si México quiere competir a nivel internacional, debe impulsar la investigación científica, el desarrollo de nuevos conocimientos y fortalecer la carrera académica, sostuvo el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers.
Durante la entrega de las cátedras Marcos Moshinsky –que consisten en apoyos económicos a científicos jóvenes cuya carrera va en ascenso– afirmó que el número de investigadores en el país se ha incrementado en los últimos años, pero aún estamos lejos del promedio deseado.
Aunque en 2012, había 420 investigadores por cada millón de habitantes, en Brasil la relación era casi del doble; en Argentina del triple; siete veces más en España, y 12 veces más en Estados Unidos.
“El crecimiento, progreso y modernización de la nación está en relación directa con su capacidad de crear y aprovechar la ciencia en beneficio de la sociedad”.
Manuel Torres, director del Instituto de Física (IF) y de la Fundación Marcos Moshinsky, explicó que con una donación póstuma del físico y aportaciones de la UNAM y del Conacyt, se han otorgado en cuatro ocasiones las cátedras, cuya misión es impulsar la ciencia en México.
En total se han recibido 250 solicitudes y se ha seleccionado a 26 investigadores, cuyos proyectos son evaluados por un comité de reconocidos científicos, informó.
Este año, los científicos apoyados por la Fundación para efectuar proyectos en el área de las Ciencias Químico-Biológicas son: Sara Huerta Yépez, de la Unidad de Investigación de Enfermedades Oncológicas del Hospital Infantil “Federico Gómez”; Luis Demetrio Miranda Gutiérrez, del Instituto de Química de la UNAM; y José Fernando Peña Ortega, del Instituto de Neurobiología de esta casa de estudios.
En el área de Ciencias Físicas se otorgaron las cátedras a Alma Yolanda Alanís García, del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías de la Universidad de Guadalajara; a Luis Antonio Pérez López, del IF; y a Pedro Antonio Quinto Su, del Instituto de Ciencias Nucleares, también de la UNAM.