Nuestro actual sistema educativo es obsoleto y promueve prácticas educativas basadas en el cambio de dinámicas de poder dentro del aula, señaló María Acaso, durante la presentación del libro “Esto no es una clase”.
La publicación, lanzada en conjunto con fundación Telefónica , se basa en la corriente llamada “Revolución Educativa”, la cual, indica la autora, destaca la necesidad de hacer un cambio radical en las aulas, donde los docentes no sólo deben enfocarse en los contenidos que les transmiten a sus alumnos, sino también en los espacios físicos de las escuela.
En este sentido, la investigadora y profesora de la Universidad Complutense de Madrid, explica que el libro propone también, un cambio sustancial en los elementos del proceso educativo, donde se da más importancia al “cómo” y no tanto al “qué” de la educación.
Durante la presentación realizada en el Laboratorio Arte-Alameda, señaló que está inspirada en la corriente EduPunk, la cual propone métodos de enseñanza muy distintos a los establecidos.
En entrevista con Educación Futura, señaló que para que este sistema pueda incorporarse a un sistema educativo como el de México se deben cambiar, en primer lugar, las dinámicas de poder que predominan en el aula, es decir, establecer nuevas dinámicas de relación entre estudiantes y profesores.
Además, utilizar métodos diferentes de experiencia, donde los aprendizajes se compartan por medio de la creación y participación inmediata de los actores en diversos ejercicios prácticos.
En México, agregó, sí es posible establecer este tipo de acciones educativas, no sólo desde aspectos gubernamentales y legislativos, sino desde los maestros, los cuales son el agente de cambio más importante.
Finalmente, señaló que los directores también representan una pieza fundamental, pues son quienes pueden empoderar a los docentes.
“Hay muchos maestros que lo quieren hacer, pero le tienen mucho miedo a la reacción de sus directores”, concluyó.
Por su parte, Alejandro Piscitelli, experto en educación transmedia en Latinoamérica, señaló que esta obra servirá como base para aquellos docentes que quieran experimentar métodos de enseñanza alternativos, pues en ella se contemplan diferentes modelos disruptivos de educación como la decoración de aulas así como la realización de excursiones y comidas entre alumno y maestros.