Para María Bertely, investigadora del Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), las Escuelas Normales Rurales siempre han representado un bastión de lucha y defensa de los derechos sociales y son cuna de seres humanos conscientes de las necesidades de la población.
Durante la mesa de debate “Derecho a la educación: equidad y justicia” realizada en el Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, Bertely explicó que debemos trabajar para lograr el derecho colectivo de educación y defensa de la legalidad enfocada al desarrollo social, tal y como hasta el momento lo hacen las Escuelas Normales.
“Las Normales son las principales instituciones que ayudan a las comunidades más alejadas y olvidadas del país”.
Por ello, consideró necesario que el Estado vea las principales necesidades de estos centros educativos, pidiendo que pare la constante insistencia por desaparecer a las Normales rurales.
Por su parte, Marisol Silva, académica del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación, de la Universidad Iberoamericana, señaló que otro gran problema de la educación en nuestro país, es el gran descuido en el tema de la inclusión, pues la población vulnerable no está recibiendo la atención necesaria del sistema educativo.
Agregó que, en este sentido, se deben mejorar las políticas de equidad, a fin de que los jóvenes con menores accesos a la educación de calidad, tengan mejores condiciones de desarrollo académico; todo ello, bajo un enfoque donde se reconozca la gran pluralidad de la población y sus distintas capacidades y necesidades.
Para ello se debe enseñar a los docentes y autoridades educativas diversas estrategias pedagógicas con miras a la inclusión y reducción de brechas formativas.
Finalmente, Alejandro Márquez, académico del IISUE, señaló que muchas veces el término “calidad educativa” no tiene estándares claros y su concepto es confuso aún para las autoridades educativas.
Para lograr la calidad, se deben tomar en cuenta las necesidades que tienen los alumnos, no sólo en la escuela, sino también en su contexto social, explicó.
Agregó que para lograrlo se necesita una enorme participación de la sociedad y de los distintos actores políticos de todos los niveles.
“Para ello no se necesitan más recursos, sino gastar mejor los que tenemos”.