En América la OEI ha hecho una serie de ejercicios y diagnósticos “en donde cada país ha aportado su propia percepción de cómo está su sistema educativo. Tenemos un documento que se denomina metas educativas 2021, que tienen que ver con distintos ámbitos de la actividad educativa, y están siendo la referencia para que cada uno de los países que formamos la OEI, puedan ver qué tan cerca o qué tan lejos están cada una de sus metas”, explicó Arturo Velázquez Jiménez, Director y Representante en México de la oficina de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
De acuerdo a esos reportes, elaborados en el año 2010, la realidad educativa en la región es desigual, “en algunos países están más cerca de sus metas, en otros más lejos. En el caso de la educación no podemos decir que México está mejor o peor, ¿en función de qué? Debemos compararnos con nuestra propia realidad, y en todo caso, tenemos que adecuar las estrategias en México a nuestras propias posibilidades” aseguró Velázquez.
El intercambio de experiencias educativas en Iberoamérica es fundamental, desde el punto de vista de la OEI, “cualquier intercambio de conocimientos o de experiencias es fundamental para el crecimiento y mejoramiento de la profesión o actividad a la que te dediques”.
Sobre la evaluación de docentes, Velázquez explica que evaluar es algo que hacemos todos los días “en nuestra actividad cotidiana, evaluamos qué tan bien o mal nos fue en el día. En el caso de la educación es lo mismo, estamos haciendo sistemáticamente una revisión de por dónde estamos avanzando y por dónde estamos atorados”.
Considera que todos los involucrados en el sistema educativo deben hacer un ejercicio de reflexión sobre cómo está funcionando todo ese proceso para ayudar a mejorar las cosas. “Hay que evaluar para mejorar, para poder saber qué tan cerca o lejos estamos de ciertas metas que nos están fijando”, afirma.
En el caso de los profesores, opina el funcionario, pueden usar la evaluación como una “herramienta para una posibilidad de mejora, de saber en dónde tienen algunas fallas y poder acceder a materiales didácticos, a cursos, y a las formaciones adicionales que les permitan desempeñar mejor su actividad docente”.
Para capacitar a profesores en ejercicio y a futuros profesores, la Organización de Estados Iberoamericanos han emprendido dos programas de intercambio, para que “puedan tener esa experiencia de vivir en otro país, con otros colegas estudiantes que se están formando para ser profesores. Eso ayudará a abrirles la perspectiva del mundo que está más allá de nuestra propia escuela y comunidad. La simple experiencia y vivencia es una aportación valiosa en la formación de la persona”.