Tres cuartas partes de los expertos en educación de WISE del mundo están insatisfechos con el sistema educativo de sus respectivos países y apenas un tercio cree que el sistema educativo de su país ha mejorado en la década pasada. Además, solo el 12% considera su sistema educativo como innovador y solo un 1% lo califica de “extremadamente innovador”. En el contexto de un mercado de trabajo en constante cambio, los sistemas educativos faltos de innovación se mueven con más probabilidad hacia atrás, y no hacia delante.
La situación de la educación contrasta con la rápida aceleración en muchos otros campos debida a la Revolución Digital que en las décadas recientes ha transformado la manera en la que las personas compran, invierten, leen, socializan, trabajan y, en general, se comunican. Sin embargo, al mismo tiempo, el estancamiento económico en gran parte del mundo, incluyendo el constante y alto desempleo en algunos lugares, está creando desafíos críticos para la juventud de hoy en día, y ciertamente para la estabilidad de los países.
Mientras el panorama educativo parece desalentador, está claro que ningún país está solo a la hora de afrontar estos desafíos. La mayoría de los expertos de WISE, en gran parte de los países del mundo, están insatisfechos con su sistema educativo y, casi en todas partes, muy pocos valoran su sistema como altamente innovador. Ahora bien, hay un consenso considerable dentro de la comunidad de WISE en cuanto a lo que la educación necesita para remediar esta situación:
- Fomentar una mayor colaboración entre universidades y empresas
- Fortalecer la profesión de la enseñanza
- Emplear la tecnología para complementar y apoyar, no reemplazar, a los educadores de alta calidad
Estas conclusiones provienen de la Encuesta “Conectando la educación con el mundo real” de WISE 2015, realizada por Gallup a través de la web entre el 6 y el 31 de agosto de 2015. La encuesta está basada en las respuestas de 1.550 miembros de la comunidad mundial de WISE: profesores, estudiantes, recién graduados, responsables políticos en materia de educación y miembros del sector privado conectados con WISE a través de los años en temas de reforma educativa. Los resultados reflejan los puntos de vista de esta comunidad única y global de expertos que han demostrado un compromiso en la mejora de la educación en colaboración con WISE.
La situación en América Latina
Latinoamérica recibe calificaciones educativas sensiblemente inferiores que la media mundial, con sólo el 11% de los expertos de WISE afirmando que están satisfechos con el sistema educativo general en sus respectivos países en comparación con el 23% a nivel mundial. También valoran sus sistemas con puntuaciones inferiores a la media en cuanto a innovación. En el lado positivo, los expertos de Latinoamérica de WISE son un poco más optimistas sobre el progreso, con el 41% que dice que su sistema ha mejorado en los últimos 10 años, eclipsando al 34% que afirma lo propio a nivel mundial.
La satisfacción general con la educación primaria/secundaria es particularmente baja con el 17%, frente al 33% a nivel mundial. El déficit es menor para la educación post-secundaria: 38% frente a 49%. Del mismo modo, mientras que relativamente pocos en Latinoamérica creen que las escuelas de primaria/secundaria están preparando a los estudiantes para el éxito en el trabajo (13% vs. 23% a nivel mundial), la cifra para escuelas post-secundaria (41%) más o menos coincide con el promedio mundial (39%).
Expertos de WISE en esta región ven la necesidad, a nivel de la escuela primaria/secundaria, de más profesores de calidad y una participación mayor de los padres. Son menos proclives que los expertos de otras regiones a creer que el tamaño de la clase o las pruebas estandarizadas sean problemáticas. Muy pocos creen que los profesores sean tratados con respeto (27% frente al 36% mundial). Y son menos propensos a estar en desacuerdo en cuanto a que los profesores sepan cómo integrar la tecnología en el aula (14% frente al 23%).
Reorientar la educación
Los expertos de WISE tienen grandes ilusiones en cuanto a lo que la educación podría y debería ser. Siete de cada 10 (69%) afirman que es el trabajo de la universidad, no de las empresas, lo que podría asegurar que los estudiantes tengan éxito en su primer trabajo. Sin embargo, solo un 39% cree que las universidades en sus países están preparando adecuadamente a los estudiantes para el mercado de trabajo, e incluso un porcentaje menor (23%) afirma lo mismo sobre las escuelas de primaria y secundaria.
La buena noticia es que la comunidad global de WISE ve un avance positivo en la educación. El estudio descubre a los expertos de WISE visualizando una mayor colaboración entre universidades y empresas para asegurar que los estudiantes prosperen en los puestos de trabajo de hoy en día. Un sistema así no solo beneficiaría a estudiantes y universidades, sino también a los empleadores del sector público y privado que requieren una fuerza de trabajo bien formada y preparada.
Los expertos de WISE siguen valorando la importancia de un título universitario, pero creen que lo que sigue faltando en un nivel post-secundaria son prácticas, tutorías, formación y planes de estudio dinámicos que aporten a los estudiantes amplias oportunidades para aplicar los conocimientos que están adquiriendo. Los expertos de WISE creen fuertemente que esas áreas son la clave en la que se debe concentrar la educación superior, y no tanto la necesidad de un mayor acceso a la tecnología o el aumento de la financiación o la orientación profesional.
- El 62% menciona la falta de trabajo/prácticas que preparan a los estudiantes para trabajos como el mayor desafío post-secundaria.
- El 52% cita la falta de aprendizaje basado en proyectos (estudiantes que apliquen su formación académica a problemas del mundo real).
- El 38% alude a la ineficaz orientación profesional.
- El 31% subraya la calidad de los profesores.
- El 18% destaca la actual falta de acceso a la tecnología
En un nivel primario y secundario, los expertos de WISE ven la calidad del profesor y la falta de aprendizaje basado en proyectos como los desafíos principales a los que se enfrentan sus sistemas educativos. El número de los que optan por estas cuestiones excede al de los que identifican el acceso a la tecnología, la necesidad de planes de estudio más rigurosos o la mejora de las pruebas estandarizadas como prioritarios.
- El 60% afirma que la calidad de los profesores es el mayor desafío para la educación primaria y secundaria de las escuelas de su país.
- El 58% alude al aprendizaje basado en proyectos.
- El 32% cita la financiación de las escuelas.
- El 30% menciona la falta actual de acceso a la tecnología.
- El 29% escoge la necesidad de un contenido más riguroso o el plan de estudios
Dos preguntas resumen la importancia dual que los expertos de WISE ponen en la educación formal y en las experiencias prácticas. Por un lado, la mayoría (57%) alentaría a un joven a matricularse en la universidad incluso si eso significara renunciar a un trabajo ideal dentro de una empresa altamente respetada; solo un 35% alentaría a ese joven a tomar ese trabajo. Por otro lado, cuando se ofrece la posibilidad de elegir entre dos tipos de recién licenciados universitarios, el 80% afirma que contratarían a un estudiante con notas discretas que tuviera unas prácticas relevantes antes que a un estudiante de matrícula sin ninguna práctica destacable.