“El hecho de que se mantenga al mismo titular del Instituto de Educación Estatal de Oaxaca (IEEPO), pone en duda la verdadera transformación del Instituto y sugiere que se trata más de una maniobra que ponga en jaque a la Sección XXII que una verdadera intención de asegurar la calidad de la educación en la entidad”, apuntan las y los integrantes del Observatorio del Derecho a la Educación y la Justicia (ODEJ).
También genera incertidumbre que no serán los docentes, ni sus representantes, quienes ocupen la titularidad del organismo. Ante la falta de detalles de la nueva estructura, el ODEJ advierta que “se despierta la duda de qué tan acabado está el perfil del nuevo IEEPO, o si se trata de una medida apresurada e improvisada para hacerle frente a la Sección XXII pues se vislumbra que sólo de esta manera se podrán llevar a cabo las evaluaciones que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha impedido en la entidad”.
A través del comunicado “De la descentralización al órgano descentralizado: perspectivas sobre el nuevo IEEPO”, el cual fue elaborado a partir del proyecto de investigación La reforma educativa en el marco del derecho a la educación y el cosmopolitismo de Mercedes Ruiz, Leonardo Oliver y Marco Contreras, de la Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, el ODEJ duda si esta es “la ruta adecuada para asegurar el pleno desempeño de los maestros y la calidad de la educación para el conjunto de los oaxaqueños”.
La duda expresada por los investigadores tiene que ver con testimonios que recogieron, en el mes de junio, de integrantes de la Sección XXII, los cuales refieren que:
- En los 11 niveles de IEEPO hay compañeros con perfil profesional, electos en asamblea, no por dedazo, con más de 15 años de servicio antes de ocupar un cargo, en suma, funcionarios con trayectoria profesional.
- Los directores de nivel son electos desde las mismas bases y con un perfil pedagógico.
A partir de la reforma del IEEPO, el ODEJ señala que existía un cuerpo colegiado, el cual ha sido fracturado con la anulación del Instituto. Hay un tejido de trabajo roto, que también se ve privado de sus vínculos con el mundo exterior pues su página web ha sido deshabilitada y en ella residían productos educativos fruto del trabajo que había desempeñado.
Para el Observatorio, “estas acciones de saboteo junto con el despliegue de la fuerza pública en la entidad le confieren a esta medida todos los rasgos de una acción impositiva del Estado y se asoman como la verdadera fuerza detrás del discurso conciliador”.
El ODEJ señala que en los testimonios recabados quedó de manifiesto la fuerte relación existente entre los maestros de la Sección XXII y la sociedad oaxaqueña, explica que en las protestas que hubo durante las elecciones, del 7 de Junio, en Tlaxiaco los maestros fueron encapsulados por los policías, pero al mismo tiempo, las comunidades bajaron machete en mano para rescatar a sus maestros, así fueron encapsulados los policías. “Son el tipo de cosas que no podrían explicarse sin el respaldo de la comunidad hacia sus maestros”.
El Observatorio del Derecho a la Educación y la Justicia es un espacio para el pronunciamiento público, impulsado por el campo estratégico en modelos y políticas educativas del Sistema Universitario Jesuita (SUJ), e integrado por académicos especializados en educación de las Universidades de Loyola Pacífico-Acapulco-Pacífico, IBERO Ciudad de México, IBERO León, IBERO Puebla, IBERO Tijuana, IBERO Torreón, Instituto Superior Intercultural Ayuuk (ISIA) y el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO).