Bien se dice que la caricatura mexicana no sería la misma sin la obra de Eduardo del Río, Rius; le propongo entonces, imaginemos una caricatura donde Alfonso Cepeda, líder nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sentado en una silla y apoyándose de una mesa, con papel y pluma en mano, escribe una carta al siempre querido y anhelado Santa. Es obvio, las fechas decembrinas invitan a todos los pequeños a imaginar que sus sueños se pueden alcanzar y cumplir la noche del 24. Y bueno, con la mirada hacia arriba y el rostro que refleja emoción y entusiasmo, este pequeño líder sindical ha escrito, nada más y nada menos que 10 peticiones; algunas de las que se pueden leer son: incremento salarial; despegue salarial; basificación; reconocimiento a la superación profesional; opciones pertinentes para la formación continua y la superación profesional; horas adicionales para los docentes que tienen menos de 20 horas, semana, mes; recursos para la promoción horizontal con incentivos; posibilidad de cambios en centros de trabajo; plazas suficientes para la promoción vertical; y pensión digna y regreso al esquema solidario (Profelandia.com, 2023).
Como sabemos, la obra del gran Rius se puede entender a partir de la conjugación de la sátira política, crítica social y análisis histórico pues, a través de sus caricaturas, exponía los problemas sociales y políticos de nuestro país, principalmente, para disentir y protestar contra el autoritarismo, la corrupción y la injusticia. Desafortunadamente este caricaturista mexicano ya no se encuentra entre nosotros porque ya ocupa un lugar muy importante en otros terrenos; desafortunadamente, quien escribe estas líneas no es muy dado al dibujo y, sus intentos por exponer las grandes contradicciones y problemáticas que son evidentes en el medio educativo, terminan en unas cuantas líneas como las que ahora escribo. En consecuencia, la caricatura descrita líneas atrás ha tenido la intención de exponer las sinvergüenzadas planteadas en las demandas que el SNTE entregará la Secretaría de Educación Pública (SEP) en lo que se ha denominado Pliego Nacional de Demandas 2024 ¡Son para reírse! Me explico.
Con seguridad alguien podría decir que dicho pliego nacional de demandas se conforma a partir de la consulta a las bases, pero, a fuerza de ser sinceros, una hoja, con algunas preguntas totalmente dirigidas para que se obtengan ciertas respuestas y que no todos contestan, ¿podría tener toda la validez científica que requiere el levantamiento de, por ejemplo, una encuesta? Con seguridad alguien podría decir que las respuestas se obtienen del procesamiento de la información contenida en esa hoja de preguntas, pero, a fuerza de ser sinceros, ¿alguna vez se ha transparentado este proceso y se ha informado qué metodología se empleó en el procesamiento analítico de los datos/información?, ¿qué categorías de análisis se construyeron?, ¿cómo fueron procesados los datos? etcétera, etcétera, etcétera.
Como es conocido, si algo caracteriza al SNTE es su nula transparencia; este es un tema bien sabido, lo que resulta increíble de concebir, es que con tal desfachatez se den a conocer con bombo y platillo esas demandas que, como tales no lo son, porque irrisoriamente es lo que le mandatan los estatutos que definen su razón de ser: Capítulo II Duración, objeto y fines del Sindicato Artículo 10. El Sindicato tiene como objeto social y fines: I. Defender los derechos laborales, sociales, económicos y profesionales de sus miembros; III. Luchar por el desarrollo personal y el logro de las aspiraciones de sus agremiados; VIII. Promover el establecimiento de condiciones de trabajo compatibles con las necesidades particulares de cada entidad de la República Mexicana; IX. Promover la revisión periódica de las condiciones de trabajo, formación, actualización, capacitación y superación profesional, evaluación y estímulos al servicio de los trabajadores de la educación, sobre parámetros vinculados al mejor desempeño.
Luego entonces, la famosa encuesta que anualmente se “levanta” entre “toda la base” no sirve más que para legitimar la razón de ser de esta organización sindical porque, de lo contrario, qué caso tendría contar con un sindicato que solo sirve para dos cosas: para nada y para nada.
Dicho esto, me parece preocupante que buena parte de esa base magisterial se muestre impávida ante el nulo trabajo sindical que viene realizando quien fuera conocido alguna vez como el sindicato más grande de América Latina. Y digo que es preocupante, porque es muy probable que esa indiferencia permita la desfachatez con la que actúa esta organización sindical; vaya, para nadie es desconocido que, hace varios años, el actual dirigente sindical levantaba jubilosamente la mano de José Antonio Meade, candidato a la presidencia por el Partido Revolucionario Institucional, pero que, una vez que éste perdió en las urnas, no dudó ni un instante para declararse aliado de la cuarta transformación de México. De hecho, como se ha visto a través de los distintos medios de comunicación, en fechas recientes, este mismo líder sindical declaró a la reciente nombrada precandidata del Morena a la presidencia de nuestro país, de apellido Sheinbaum, “amiga del SNTE”. Lo que quiero decir, es que lejos de luchar por los derechos laborales y profesionales de los trabajadores de la educación, esta organización sindical, y sus más recientes líderes, no han hecho otra cosa más que ponerse a la orden del gobernante en turno que, para acabar pronto y volviendo a la caricatura inicialmente descrita, podría ser Santa.
Este mismo Santa, en resumidas cuentas, es quien decide qué regalo es el que le traerá en navidad; no, no es porque el SNTE lo exija, es porque el presidente de este país es quién así lo decide. Si esta afirmación no fuera cierta, ¿por qué si desde hace algunos años este líder sindical ha venido “pugnando” por una jubilación que eliminé las UMA’s y se retome el salario mínimo como unidad de medida nada más no ha avanzado en el actual gobierno?; lo que es peor, ¿qué es lo que ha hecho esta organización para exigir tal demanda cuando de sobra sabe que vulnera los derechos adquiridos de los trabajadores de la educación activos y jubilados?, ¿no acaso sigue de brazos cruzados sin hacer prácticamente nada, solo de vez en cuando incluirlo en algún pomposo discurso?
Lo más grave, pienso yo, pasa por la nula democratización sindical y la inexistente renovación de su dirigencia nacional, obviamente, bajo el cobijo de la ex titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social ¡Bienvenida la cuarta transformación cuya promesa de democracia sindical quedó posiblemente en un escritorio!
Dudo mucho que la base en estos días se deje engañar; hay quienes desde un lugar muy lejano observan con cierta impavidez o indiferencia lo que sucede en y con el SNTE, el trabajo escolar podría ser lo suyo, pero también, hay quienes desde su zona de confort han navegado en aguas que podrían ser catalogadas como calmas; no obstante, también hay un sector que se mueve, hay que decirlo, para tomarse la foto esperando pertenecer o ser parte de ese cacicazgo sindical de sobra conocido y que coacciona, discrimina, excluye y restringe; otros, de alguna forma hacen roncha y dentro de misma organización sindical, sin formar parte de la CNTE, hacen disidencia; unos más se encuentran en la siempre pujante y vigorosa Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación. En fin, son una base que podría ser tan compleja como uno quiera verla; base que podría tener otra organización sindical si así lo decidiera, pero, tal vez, como estamos en navidad, el buen Cepeda pediría que esto no ocurriera porque su reino llegaría a su inexistencia.
Al tiempo.
Referencias:
Profelandia.com (2023). Define Snte demandas que planteará a la SEP en negociación salarial. https://profelandia.com/define-snte-demandas-que-planteara-a-la-sep-en-negociacion-salarial-2024-te-contamos/?fbclid=IwAR0XelxsL8p_GT4ZrVBSRtEODgLH1a4m1Wji-ImNFhlQHslUScr-WRtUt4E
SNTE (2019). Estatutos. https://snte.org.mx/wp-content/uploads/2019/12/Estatuto-SNTE12-Marzo-2019.pdf