En el marco de la inauguración del Congreso Nacional de Investigación Educativa, Germán Álvarez Mendiola, presidente del Consejo Mexicano de Investigación Educativa señaló que, actualmente, el diseño de políticas es precario y, desafortunadamente, existen problemas en el sistema educativo como los procesos de evaluación docente, la evaluación de aprendizajes, la promoción de estudiantes de un nivel a otro y, en general, la marcha cotidiana de la educación.
También, agrega, existe un gran reto respecto a los recursos que se deben utilizar para subsanar problemas históricos en este rubro.
Si se buscan acciones transformadoras, se requiere un ejercicio presupuestal bajo reglas estrictas de transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción.
Explicó que el sistema educativo mexicano ha sufrido, a partir de 2014, una drástica pérdida de recursos financieros. “El presupuesto aprobado en la semana pasada por la Cámara de Diputados deja 364 mil millones de pesos para la educación en 2022, lo cual representa un ligero aumento con respecto al 2021; pero hay que considerar que en 2014 fue de 525 mil millones de pesos, es decir mucho más que ahora. El presupuesto del 2022 representa el 3.1% del PIB, la proporción más baja en los últimos siete años”, detalló.
Insistió que esos recortes presupuestarios hacen imposible atender los problemas de sanidad en muchos planteles, así como de la necesidad de infraestructura, capacitaciones en lo socioemocional, formación docente, el combate a la interrupción escolar y la baja conectividad a internet.
En educación superior, explicó que el presupuesto no es proporcional al aumento de la matrícula, la cual incrementó 19.4% en 5 años, sin embargo, en el mismo periodo, el presupuesto decreció 9.8% en términos reales.
Pese a los relevantes avances que supone la nueva Ley General de Educación Superior, se han presentado riesgos para la autonomía; y la falta de recursos compromete la gratuidad y la universalización constitucionalmente estipuladas.
Bajo este contexto, indica que el COMIE ha trabajado arduamente para mantener a la comunidad de investigadores presentes y activos, y ofrecer a la sociedad herramientas para superar y trabajar con los retos de esta compleja circunstancia.
Finalmente, señaló que este congreso convocado bajo el análisis de los impactos de la pandemia del covid-19 y el resguardo sanitario sobre la educación, representa una contribución extraordinaria de los investigadores para generar comprensión sobre nuestra realidad educativa y hacer propuestas de solución a los problemas de la educación mexicana
Por su parte, Melitón Lozano Pérez, Secretario de Educación de Puebla, afirmó que la investigación educativa es tan urgente para buscar un futuro de justicia y equidad, sobre todo, en atención a la población más vulnerable.
La investigación educativa debe tener sentido y vocación pedagógica. Hacer investigación es construir utopías realistas que hagan frente a un sistema capitalista, patriarcal y colonial.
Por último, insistió que la realización de este Congreso fortalece el ejercicio del derecho a la educación y abona a las discusiones públicas en la materia.