Proyecto de investigación: La reforma educativa en el marco del derecho a la educación y el cosmopolitismo
Universidad Iberoamericana
Las reformas educativas en curso en México y Perú, ambas aprobadas en 2013, se enmarcan en una tendencia a la regulación de la labor docente a través de dos procesos: el nuevo gerencialismo público (Hall y McGinity: 2015) y el pago por desempeño al docente (Sánchez y Corte: 2015). En el primer caso se exige del funcionario público, en este caso el docente, una continua rendición de cuentas así como estándares medibles a través de las evaluaciones con el propósito de inculcar en el docente el autogobierno.
Esta tendencia mundial de las políticas de pago por desempeño al docente tiene una historia en común en América Latina. Debido a la suspensión en el pago de la deuda externa con los organismos acreedores, se diseñaron políticas de ajuste estructural que redujeron el gasto social. En el ámbito educativo esto se justificó con una excesiva racionalización del salario docente al fijar un piso salarial bajo, cuyos aumentos estarían determinados por la evaluación individualizada.
Esta política se basa en dos principios cuestionables: uno, que para hacer de la docencia una profesión rigurosa se debía inhibir un creciente techo salarial y dos, que el diferente esfuerzo de cada docente ameritaba una evaluación por separado de manera que el salario correspondiera con el mérito de cada quien. Sin embargo, estas políticas han generado diferenciación salarial entre pares, creando una estructura piramidal de ingresos, un clima de competencia entre colegas, así como un desgaste en la salud de los docentes al estar expuestos al estrés de las evaluaciones, algo que el mismo INEE documentó tras concluir la reciente jornada de evaluación de desempeño (Gómez, El Universal, 18.12.15).
Lo anterior ha generado procesos de resistencia por parte del magisterio que apelan a visibilizar la precarización de la que son objeto a raíz de políticas que reducen el gasto público en función del disciplinamiento fiscal. Por el contrario, los gobiernos promotores de las reformas así como los organismos internacionales, señalan a dichas manifestaciones de resistencia como reacciones conservadoras de un sector que busca defender sus privilegios. En el caso de México, este discurso se hace presente en la postura del secretario de educación Aurelio Nuño al ignorar el debate al que lo convocó la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) (Valle, Reforma, 14.12.15). El secretario aseguró que no se prestaría al “show político” ya que no se trata de discutir cómo no ejecutar la reforma sino de cómo mejorarla. Sin embargo, tampoco ofreció otro formato de discusión, se ha limitado a reiterar el diálogo pero sin llegar a una propuesta concreta (Valle, Reforma, 14.12.15).
Es debido a esta falta de comunicación que se pierde la oportunidad valiosa de debatir entre actores antagónicos, que a pesar de sus confrontaciones y posturas distintas, son capaces de entablar el diálogo. A través del seguimiento realizado al caso de la reforma magisterial en Perú en el contexto latinoamericano podemos hallar un contrapunto interesante al respecto. El Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP) celebró su Segunda Convención Pedagógica Nacional los días 11 y 12 de diciembre en Lima. Con una postura abiertamente opositora a la Ley de Reforma Magisterial reglamentada el 3 de Mayo de 2013 que instala la evaluación como condición de ingreso, promoción y permanencia, invitó a funcionarios del Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (SINEACE) así como de la Dirección General de Educación Básica a debatir sus puntos de vista.
El punto de discordia del SUTEP con respecto a la postura del Ministerio de Educación está centrado en la negativa de una reestructuración total con miras al próximo ciclo escolar, sin haber evaluado antes los resultados del currículum que se han venido impulsando. Se acusa la falta de autoevaluación por parte de las autoridades y el hecho de que al magisterio no se le permita participar en el Diseño Curricular Nacional, que es una de las políticas clave en el sistema educativo peruano. El eje de la propuesta alternativa del SUTEP, presentada por Hamer Villena secretario general del CEN del SUTEP es impulsar la figura de supervisión educativa en vez de la figura de acompañante, de manera que se entable una relación de reciprocidad más que de vigilancia. A su vez, los propios delegados del SUTEP increparon al Mtro. Villena que su propuesta no sea más radicalmente opuesta a la tendencia hegemónica porque él sigue postulando la necesidad de una figura externa que cataliza la labor del docente en el aula. Cabría señalar que dicha propuesta es una etapa intermedia entre las políticas hegemónicas y el alumbramiento de una política alternativa.
Dicha interpelación es también un caso contrastante con el sindicalismo magisterial mexicano. El diálogo directo y entre iguales que se entabla entre el secretario general y las bases del SUTEP parece lejos de verse reflejado en la estructura del SNTE, de ahí la razón que dio origen a la CNTE, la de tratar de democratizar al sindicato, tarea que en 36 años ha corrido con sus propias dificultades. Hubo más improvisación que planificación en el Oficio presentado al secretario de educación para debatir sobre el modelo educativo. Retarlo a presentarse en las escalinatas del Auditorio Nacional “o algún espacio público” tiene un trasfondo más mediático que académico. Eso le dio razones al secretario Nuño para desestimar el llamado de la Coordinadora. En cambio, el hecho de que los funcionarios del Estado en el caso de Perú hayan accedido a participar en la Convención Pedagógica del SUTEP se debe en buena medida a que asistían a un evento formal y con una dinámica estructurada. En suma, se observa el papel clave que desempeña el debate en la conducción de una reforma democrática. Por un lado, con un diálogo directo entre bases magisteriales y dirigentes y por el otro con el intercambio de ideas entre actores confrontados dentro de un formato agonístico. ¿Qué consecuencias puede tener para la presente reforma educativa en México la constante evasión al diálogo y la verticalidad del sindicato magisterial? El caso de la reforma magisterial en Perú es un espejo para observarnos, si bien ambos procesos son paralelos, el ingrediente del debate puede marcar la diferencia entre una reforma impulsada más por la fuerza que por la concertación entre actores diversos.
Referencias
CNTE, “Oficio presentado al Secretario de Educación Pública, 27 de noviembre 2015”. En Pacheco, Alejandro, “CNTE reta a Nuño a debate público en el Auditorio Nacional”, SDP Noticias, 27.11.15
Gómez Quintero, Natalia, El Universal, “Maestros evaluados, bajo presión excesiva, reporta el INEE”, 18.12.15.
Hall, David; McGinity Ruth (2015). “Conceptualizando la identidad profesional del maestro en tiempos neoliberales: resistencia, cumplimiento y reforma”, Archivos del Análisis de Política Educativa, Universidad de Arizona, Marzo.
Sánchez, Manuel; Corte, Francisca (2015). “La evaluación a la docencia: algunas consecuencias para América Latina”, Revista Mexicana de Investigación Educativa, Vol. 20, No. 67.
Valle, Sonia del, Reforma, “Quiere SEP diálogo, no show político”, 14.12.15.
Valle, Sonia del, Reforma, “Se queda la CNTE esperando a Nuño”, 14.12.15.