En México se considera al adulto mayor como una persona que tiene sesenta años o más. Para muchas sociedades marca el inicio de una etapa donde buena parte de las personas presentan condiciones de vulnerabilidad física, social y económica, sin embargo, la edad no debe ser considerada como elemento discriminatorio para negar el acceso a la educación a las personas adultas mayores, ya que el conocimiento es parte de los derechos humanos y no deben existir barreras infundadas que impidan a nadie continuar a lo largo de su vida, el desarrollo en un ambiente escolar.
Las personas mayores poseen un cúmulo de saberes y experiencia por aprovechar, siguen siendo productivas y pueden ser incorporadas a empresas y escuelas a través de programas destinados a cuidar su participación en estos espacios dentro de un ambiente digno y motivante. Las estadísticas muestran que la población de adultos mayores en nuestro país es significativa. Con la ENOE 2023 se calculó que en México habían 10.2 millones de mujeres de 60 años y más, de las cuales el 20.5% (2.1 millones) estaban en la población económicamente activa (PEA), así como 8.3 millones de hombres en donde 48.4% de ellos (4.0 millones) están en la PEA.
Los datos muestran también que en la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS, 2022) se identificó que el 17.6% de las mujeres y el 18.3% de los hombres experimentó discriminación, siendo la causa más frecuente la discriminación por la edad. En su experiencia cotidiana, las personas de sesenta años y más declararon que perciben poco o nulo respeto. Así también, 1.7 millones de mujeres y 1.9 millones de hombres percibieron la negación de un derecho de manera injustificada durante los últimos cinco años y el 46.8% de las mujeres y el 38.6% de los hombres consideraron que se les negó el derecho a atención médica o medicamentos así como el otorgamiento de apoyos de programas sociales al 38.7% de las mujeres y al 28.6% de los hombres (INEGI 2023a).
En lo relacionado a la violencia, en la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH, 2021), es posible identificar que 14.6% de las mujeres de sesenta años y más sufrió algún tipo de violencia en el último año, que el 13.0% de ellas sufrió violencia emocional, 4.7% de violencia económica, 1.5% declaró haber sufrido violencia física y finalmente el 0.5% declaró haber sufrido violencia sexual (INEGI, 2022).
Dadas las cifras relacionadas y la vulnerabilidad presente, es necesario acercarse a las investigaciones sobre el envejecimiento, un estudio sobre investigaciones realizadas en Brasil, México, Argentina y Chile (Nazal et al., 2022), permite establecer elementos importantes en los cuatro países latinoamericanos revisados, por ejemplo, que este campo disciplinario no se consolidó en la mayor parte de los países hasta la década de 1990 y actualmente la producción antropológica sobre la importancia del envejecimiento permite comprender las relaciones intergeneracionales, de parentesco, de autoridad y las formas de distribución social del poder.
El envejecimiento suele estar catalogado como un proceso biológico del ciclo vital, pero la vejez es una significación y, en consecuencia, son las construcciones sociales las que permiten clasificar lo que es o no viejo, ya que depende de las condiciones, las funciones y los procesos de alterización en boga en cada contexto, además, porque las nociones de ciclo vital también son influenciadas y comprometidas por otras construcciones sociales.
Los estudios revisados permiten cuestionar otras naturalizaciones de los roles y significados de la vejez, planteando sus heterogeneidades configurativas en diferentes contextos sociales de cada país y en cuanto a los enfoques de género, que se consolidaron también en los años noventa, se supera aquella visión sobre la vejez enfocada especialmente en el rol de los hombres mayores y su relación con la autoridad y el estatus (Nazal et al., 2022).
Cada vez más se están explorando no solo la diversidad de la experiencia de la vejez entre sociedades, etnias, clases o géneros distintos y adquiere gran importancia el indagar la manera de cómo los agentes van negociando, resignificando y resistiendo las significaciones y determinaciones sociales. Existen, además, alternativas de aprendizaje para participar en los cursos que ofrecen los programas universitarios para mayores que básicamente son cursos estructurados, enfocados en el desarrollo humano cuya intención es la socialización entre pares para generar una red de apoyo.
El pasado 26 de enero, inició el “Diplomado en Envejecimiento Activo y Saludable” promovido por la Vicerrectoría de Investigación y Estudios de Posgrado de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla BUAP, a través de la Escuela de Desarrollo de Habilidades Científicas y de Innovación. En él se busca que los adultos mayores adquieran conocimientos y herramientas de acción diaria para una vida activa y saludable mediante la comprensión del envejecimiento y la vejez, conocer lo que debe mejorar en su vida diaria para vivir esta edad adulta con plenitud y saber cómo cuidarse y comunicarse mejor.
Los grandes temas a tratar en las sesiones que terminarán el 23 de agosto son: a) Vida individual, familiar y social; b) Salud, autocuidado, nutrición y actividad física; c) Uso de herramientas tecnológicas; d) Desarrollo de talentos y e) Derechos y obligaciones de las personas adultas mayores, ahorro y planeación de vida.
Este diplomado está dirigido a toda persona mayor de sesenta años y se desarrolla en sesiones presenciales todos los viernes hábiles de 9.00 a 13.00 horas que comprenden 180 horas de valor curricular. La creación y gestión del diplomado la realizó la Dra. Hidalia García Ríos y se llevará a cabo en la Dirección de Innovación y Transferencia de Conocimiento DICTCoBUAP.
Todos los que fuimos invitados para asesorar en este diplomado estamos muy entusiasmados con esta propuesta y esperamos que los alumnos inscritos cuyas edades fluctúan entre los sesenta y los 92 años de edad aprendan, compartan, reflexionen, resignifiquen sus experiencias y disfruten el desarrollo de las sesiones. Ya les compartiré mis vivencias trabajando en la primera temática propuesta a través de la dimensión recreativa, cultural y social del autocuidado. Seguramente será una experiencia única que considero pionera, como muchas de las propuestas que actualmente realiza la BUAP.
Referencias
Estadísticas sobre envejecimiento en México http://estadistica-sig.inmujeres.gob.mx/formas/tarjetas/Envejecimiento.pdf
Nazal, Esteban, Gonzálvez, Herminia, & Guizardi, Menara. (2022). Perspectivas sobre el envejecimiento en Brasil, México, Argentina y Chile. Antropologías del sur, 9(18), 19-38. https://dx.doi.org/10.25074/rantros.v9i18.2314