Michelle Bachelet, presidenta chilena, afirmó que una educación gratuita pero sin calidad “no sirve”.
Igualmente defendió el trámite previo a la presentación de proyectos de ley, respondiendo a las críticas que el movimiento estudiantil hace a la reforma educacional. La mandataria subrayó la necesidad de contar con un sistema gratuito pero de calidad para evitar por un lado el endeudamiento de las familias y preparar, por el otro, a los jóvenes para mejorar sus niveles de vida.
Tras anunciar nuevos programas de capacitación laboral para mujeres y jóvenes en la comuna popular de San Joaquín, que beneficiarán a más de 450 mil personas, la mandataria dijo que “hoy estamos dando un paso fundamental para que los sistemas de capacitación, certificación y educación trabajen estrechamente unidos”.
Agregó que “esto es una ramita de la reforma educacional, acuérdense que pronto vamos a mandar los proyectos de ley y el que mandamos recién es para evitar en Chile lo que pasó en la Universidad del Mar, una universidad que quiebra y se quedan los chiquillos sin estudios, una tremenda deuda para sus familias y una tremenda incertidumbre”, agregó.
En ese contexto, recordó que “eso es parte de la reforma, pero no es el corazón de la reforma. El corazón lo vamos a estar mandando pronto, porque lo que queremos es una educación de calidad, primero que nada, porque gratis y mala no le sirve a nadie”.
“Queremos que los chiquillos y chiquillas, niños y niñas, nietos y nietas que tengan una educación de calidad, ese es el primer objetivo. Y segundo, que nadie con talento y capacidad se quede fuera de las posibilidades y que las familias no se queden endeudadas”, enfatizó.
En esa línea, Bachelet recalcó que “por eso hemos dicho educación gratuita, porque no queremos a nadie endeudado hasta el cogote, francamente, y calidad en todos los niveles”.
“Esto es un factor de la economía. Si tenemos a todos bien calificados, bien capacitados, haciendo cosas adelante, la economía crece, pero crece como nosotros queremos que crezca, que brinde más bienestar a cada uno de nosotros, que no sean números grandes y bonitos que vemos en la pantalla de televisión, sino que entre a las casas”, sostuvo.
PROTESTA ESTUDIANTIL
La administración de Michelle Bachelet ha visto desfilar el jueves (8 de mayo) su primera gran manifestación. Decenas de miles de jóvenes de los tres principales grupos de estudiantes marcharon por las calles de Santiago y otras siete ciudades de todo el país para protestar por el modelo de financiación educativo, una petición que fue tratada por el expresidente Sebastián Piñera, pero que no satisfizo a los jóvenes. La jornada fue empañada por un grupo de encapuchados que se enfrentó con la policía y dejó un saldo de 101 detenidos y 20 carabineros heridos. Tres de ellos por cócteles molotov.
La nutrida manifestación, de al menos 40.000 personas, se realizó tras dos meses de tregua que los estudiantes habían otorgado a Bachelet. En ese tiempo el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, había celebrado un par de reuniones con varios grupos de estudiantes para tratar el tema de la reforma educativa. En diciembre pasado, después de arrasar en los comicios, Bachelet prometió educación universitaria gratuita y de calidad y el fin de los subsidios del Estado a la educación privada. Este jueves, los estudiantes volvieron a las calles para presionar a las autoridades. El Gobierno chileno les permitió desfilar frente al palacio de La Moneda y el ministerio de Educación, algo que fue considerado como “simbólico” por los manifestantes pues la ruta les había sido prohibida en 2012 por la administración de Sebastián Piñera.
La prensa chilena asegura que la mayor parte de la marcha se desarrolló en paz y fue encabezada por emblemáticos exdirigentes estudiantiles como Gabriel Boric, en Santiago, y Camila Vallejo, en Valparaíso. Sin embargo, al final del recorrido que culminó en el Parque Almagro, en el centro de Santiago, un grupo de encapuchados protagonizaron escenas de violencia lanzando rocas y cócteles molotov a los carabineros. La policía utilizó un furgón antidisturbios para dispersar a la multitud.
El general de los carabineros, Ricardo Solar, informó de que 101 personas fueron detenidas. “Además, hay al menos 20 policías heridos, tres de ellos quemados con bombas incendiarias”, señaló el oficial. Solar calificó de “tranquila y ordenada” la marcha durante todo su trayecto. “Un grupo minoritario organizados atacó de forma agresiva a los carabineros”, describió el general.
El intendente metropolitano, Claudio Orrego, ha señalado que el Gobierno creará un “comité de inteligencia” con todas las policías para “identificar a estos grupos organizados que no son espontáneos y que están organizados solo para realizar desórdenes”.
Con información de El País.