Néstor Manuel Trujano Molina[*]
1.- Con la firma de tratado de libre comercio (TMEC) surgió la condición de la elección libre, directa, universal y secreta en los sindicatos del país (2019). Los estatutos de diversos sindicatos entraron a revisión para adecuarlos a esta condición.
Los charros no consideraron esta opción porque al fin de cuentas tienen el monopolio de las decisiones en el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y decidieron elaborar un reglamento para la elección seccional a modo, sin consultar a nadie, considerando que con registrar éste en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCyA) es suficiente para proceder arbitraria y unilateralmente; olvidando dolosamente que en el SNTE confluyen históricamente diversas formas de opinión y organización sindical y educativa.
2.- Tal y como se ha documentado por divers@s periodistas, el CEN del SNTE inició la elección de directivas seccionales poniendo a prueba el dichoso reglamento de marras. Primero en secciones donde la réplica es mínima, encontrando un fuerte abstencionismo de las y los trabajadores de la educación, incluso del orden del 50%. Situación que pone en entredicho la funcionalidad de tal reglamento.
Para el charrismo todo transita viento en popa hasta que llegan a las secciones y estados con fuerte presencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE): Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán y la sección 9 de Ciudad de México. El reglamento bajo esas condiciones es inoperante, requiere adecuaciones según sea el caso; pero en la nueve todo se ignora por los charros, porque desde hace meses e incluso años se prepara un charrazo.
3.- En los Estados donde el charrismo no las tiene consigo, procede a negociar la convocatoria para relevo seccional con suficiente anticipación incluyendo procedimientos y formas como en Chiapas y Oaxaca; imponiendo o subestimando en otras: Michoacán, Guerrero y sección 9 CDMX.
Es evidente que las irregularidades de la aplicación de un reglamento incluso antiestatutario no empiezan recientemente sino desde su misma elaboración e incongruencia con el estatuto el cual, señala en uno de sus artículos que las elecciones para renovar representaciones seccionales se deben convocar con un mes de anticipación. A todas luces eso no se permitió para la sección 9 Democrática.
4.- La última reforma a los estatutos ocurrió hace más de 30 años aproximadamente. Desde ese entonces a la fecha se han presentado una serie de modificaciones a la ley y la norma educativa y el CEN del SNTE, ni por enterado; cree tener la sartén por el mango, al grado de desobedecer incluso, un mandato de la JFCA de reposición del congreso para relevo seccional de 1998. Pasaron 10 años sin elecciones de comités delegaciones y comité seccional en la sección 9, porque así lo decidió el CEN del SNTE. Diez años de impunidad hasta que en 2008 decidió convocar a congreso para relevo seccional sin elección de comités delegacionales. Nuevamente chocó con pared. Las bases de la sección 9 estaban organizadas para otro charrazo. Esta vez los charros citaron a los delegados en una sede falsa mientras ejecutaban la farsa en un garaje acondicionado como salón.
5.- Desde 1993, año en que se emitió el decreto para la ley general de educación, no se pudo transitar la descentralización de los servicios educativos al Distrito Federal por las limitantes administrativas y por la oposición de los charros del CEN del SNTE. Desde ese momento se creó una Administración Federal de la Educación en el DF. Cuando el Distrito Federal devino en CDMX en 2015-2016 tampoco se pudo transferir el servicio educativo a la CDMX, porque el gobierno federal no logró establecer un mecanismo de tránsito que otorgara los servicios educativos con todo y presupuesto. Los charros en todo este proceso se han opuesto a la descentralización educativa en la CDMX, contribuyendo al estado de excepción administrativa en el que se encuentran las y los trabajadores de la educación de las secciones 9, 10, 11 y 60. De paso se bloquea la aplicación de la ley de educación de la CDMX, elaborada por la asamblea legislativa a propuesta del diputado Rigoberto Nieto y que contiene avances en torno a la mejora social, asistencial y económica de los y las docentes; pero que, desafortunadamente contiene un transitorio que plantea que sólo entrará en vigor después negociar con el CEN del SNTE.
6.- De la primera emisión de la Ley General de Educación a la fecha han pasado 30 años de una indefinición que se perfila como estado de excepción. Del charrazo de 1998 a la fecha han pasado 25 años sin comités delegaciones. Del charrazo de 2008 han pasado 15 años sin elección estatutaria de comité seccional. Desde 1998 a la fecha los charros del CEN del SNTE, invariablemente han retenido las cuotas sindicales que representan en números moderados, un orden de 729 millones de pesos de los cuales los agremiados de la sección 9 democrática no han recibido ni un quinto.
7.- En 2008, ante el fallido intento de charrazo, el CEN del SNTE instrumenta una comisión ejecutiva encabezada por el traidor chiapaneco Julio Esteva Peralta y, por si fuera poco, opera en tres sedes en CDMX: 1.Metro Chabacano, 2. Calzada Ermita – Iztapalapa (metro Constitución de 1917) y 3. Calzada Miramontes en Villa Coapa es decir, no una, sino tres comisiones ejecutivas ilegales y antiestatutarias que operan en coordinación con las autoridades oficiales que canalizan a las maestras y maestros hacia estos centros sindicales para cooptar su voluntad, trabajo que realizan durante 15 años sin autoridad oficial de la JFCA que les haga notar la ilegalidad de la acción.
8. Durante 25 años, sin cuotas sindicales, sin comités delegaciones, sin vida sindical estatutaria, con asedio oficial, en resistencia permanente, con tres comités seccionales democráticos encabezados por maestras y maestros que por la mañana y tarde trabajan en la docencia y por la noche hacen gestoría sindical. Así, llegamos a la emisión del enésimo intento de charrazo en la sección 9 en el cual se emite una convocatoria amañada (23 de mayo 2023), con tiempos reducidos y plagada de irregularidades, incluso estatutarias que no permiten la organización y participación libre y democrática de la mayoría de las y los docentes de la sección
9. La JFCA, como Pilatos, se lava las manos frente a la infamia en ciernes. En su nariz se cocina una burla flagrante de violencia sindical y solo alcanzan a ver que se cumpla un inexistente derecho de libre elección. Según ellos son invitados involuntarios/voluntarios de la infamia.
Lo mismo ocurre con la Autoridad Educativa Federal de la Ciudad de México (AEFCM) que no alcanza a ver que toda su estructura y logística contribuye para presionar y acarrear docentes a los centros de votación (supervisor@s y director@s al grado de golpeadores y porros); y una secretaría de Gobernación, incapaz por conveniencia, de llamar a cuentas a unos delincuentes sindicales que operan libremente unas elecciones sindicales improcedentes por excluyentes, ilegales, fraudulentas y falsas que devendrán en un comité espurio. Frente a ellos ocurre por lo menos violencia en derechos civiles y conculcación de derechos sindicales.
9.- Esta crónica de la infamia no puede pasar por alto la mismísima presidencia de la República. Acá se cumple cabalmente “el hacer mucho para que todo siga igual”. Hablar cada mañana de democracia y derecho y por la tarde negar la democracia y el derecho a un sector de la población. Hablar cada mañana de la libertad y la libre elección y crítica; y por la tarde permitir con pleno conocimiento y flagrancia el charrismo sindical.
Criticar cada mañana el corporativismo y la corrupción y por la tarde hacer la vista gorda ante el funcionamiento de instancias de gobierno al servicio de lo que criticó.
La historia no miente: antes de las masacres de Río Blanco, Veracruz y Cananea, Chihuahua, los trabajadores pidieron al presidente Porfirio Díaz fungiera como árbitro para evitar el abuso y la violencia contra los trabajadores y sus familias. Porfirio Díaz ordenó acallar a los revoltosos.
Los representantes del movimiento democrático de la planilla Roja Democrática 9 intentaron comunicar a la Presidencia de la República, el 13 de junio, que al día siguiente se cometería un abuso contra los trabajadores de la educación de la sección 9 en el que habría acarreo, padrón alterado, golpeadores y porros y funcionarios educativos de la AEFCDMX al servicio del fraude. Al día siguiente, la presidencia no alcanzó a ver más allá de la diatriba de sus contradicciones electorales cuando frente a ellos, en la misma CDMX un grupo de corruptos, en flagrancia y con violencia sindical ejecutaban un burdo teatro electoral del cual, no alcanza a desmarcarse, golpeando con la mano derecha por la mañana para más tarde sobar los golpes con la izquierda. Otra vez la historia no miente y coloca a cada uno, en su lugar, por ahora, cerca de la famosa frase “ni los oigo, ni los veo”.
10.- La infamia cumple su guión trazado en años de asedio contra el digno movimiento de las y los trabajadores de la educación de la sección 9 Democrática; los mismos que contribuyeron junto al pueblo que la libertad se construyera con la fuerza de 30 millones de votos.
TRAMA.
A) 25 años de impunidad y 15 años de asedio desde la estructura oficial.
B) 23 de mayo 2023 publicación de una convocatoria unilateral y antiestatutaria.
C) 24 al 26 de mayo, plazo de tres absurdos días para inscribir planillas.
D) 25 y 26 de mayo, eufemismo y discursos falsos del charrismo garantizando la libre participación, pero sin otorgar garantías de inscripción, libre organización y elección.
E) 2-13 de junio, negación de registro político de la planilla Roja Democrática 9 y ocultamiento de los funcionarios electorales en hoteles, cubiles y otros espacios solo imaginables desde la trama mafiosa del CEN del SNTE.
F) 14 de junio, simulación y engaño; usurpación y trampas; antidemocracia e imposición.
G) 18 de junio, presentación de resultados con números incoherentes dónde lo oscuro es diáfano y el querubín sale triunfador en una trama anunciada.
H) 19 de junio, la euforia simbólica, numeralia falsa y la realidad necia: votaron 30 mil (un par de ceros menos). La Resistencia se prepara, de acuerdo con sus condiciones, para otra batalla más contra la indiferencia gubernamental, la simulación y abuso de poder y la defensa de la educación y el derecho de la libertad de organización y libre manifestación.
EPÍLOGO.
Una foto fugaz, con prisa, de funcionarios de diversos niveles, sonrientes, que voltean nerviosos hacia todos lados junto al querubín y sus corifeos prometiendo que otros tiempos están por venir. Por delante seis años más de lo mismo. No tienen tiempo de concluir la escena porque son golpeados por la necia realidad y la historia que se posesiona del escenario para reescribirse nuevamente gritando:
¡EN LA NOVENA, LOS CHARROS NO PASARÁN!
[*] Profesor de primaria y secundaria de la Sección 9 Democrática SNTE-CNTE