El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán, confirmó que personas armadas ingresaron a la Rectoría y se llevaron por unas horas al director de Adquisiciones, Abraham Garay Velázquez; le exigieron una “cuota” y le advirtieron que cada mes pasarían por la misma cantidad para un grupo de la delincuencia organizada.
Por el hecho, Saldaña Almazán se reunió con el gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero, y el procurador de Justicia, Iñaky Blanco.
Al término de la reunión, el académico informó que el gobierno estatal se hará cargo a través de la Fiscalía local de investigar los hechos. “Las cámaras de seguridad de la Rectoría ya están intervenidas por la Procuraduría; nosotros coadyuvaremos con la investigación”.
Sin dar detalles, por la secrecía de las investigaciones, confirmó que fue por la mañana que hombres armados ingresaron al área financiera, donde está el departamento de Adquisiciones y se realizan diferentes pagos a proveedores, y se llevaron al funcionario.
No quiso mencionar montos de lo que se tuvo que pagar para que Garay Velázquez fuese devuelto con sus familiares, ni dijo cuánto le pidieron de manera mensual para los presuntos delincuentes, pero recordó que sucesos de ese tipo han ocurrido en la UAG; por ejemplo, hace tres meses, sujetos armados dispararon en una pierna al subcontador general y lo sacaron de sus oficinas, lo querían extorsionar.
Señaló que en fechas recientes profesores de diferentes regiones del estado han sido víctimas de secuestros express , “pero no tenemos una plantilla de casos”; algunos, no se atreven a hacerlo público por miedo a represalias, otros, han recibido amenazas vía telefónica, donde se les requiere el pago de una cuota mensual.
“Vamos a tener mayores medidas de seguridad, pero estamos viendo de qué forma algunas personas no lo verán bien, porque es una universidad democrática, pero se está revisando con el estado la manera de resguardar las instalaciones”.
Aseguró que al funcionario sólo le quitaron dinero de la UAG, pero las personas que se lo llevaron no le pidieron otros documentos importantes como lista de cuánto pagan a algunos proveedores.
Dijo que por el momento “están suspendidas las actividades en el área financiera”, hasta que se restablezca un mecanismo en el que no se ponga en riesgo la integridad de los trabajadores, pero por el momento tampoco tienen contemplada seguridad personalizada.
Hoy en la Rectoría, que es donde se realizan a diario 200 trámites, las actividades se redujeron a lo administrativo; el área de Finanzas, como comentó Saldaña lució vacía, no había personal, actividades que podrían retomarse hasta el lunes o de regreso del periodo vacacional.
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