Alumnos de la Universidad Iberoamericana construyeron e instalaron una microcentral hidroeléctrica en una granja autosustentable ubicada en Tzimol, Chiapas, la cual es capaz de generar mensualmente dos mil 600 kilovatios hora (kvh).
La granja dedicada a la cría de venados y, en el futuro, a la producción de azúcar mascabado, puede satisfacer, sin problemas, las necesidades de electricidad de la granja, cuyo consumo promedio es de 300 kvh al mes, energía que se utiliza actualmente de forma doméstica y para activar el sistema de bombeo empleado para el riego de un campo de cultivo.
Los estudiantes de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (IME) y de Ingeniería Industrial de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, realizaron este proyecto como parte de su servicio social, construyeron una turbina hidráulica que aprovecha la fuerza disponible de la caída de agua de un riachuelo que pasa por la granja, por lo cual la energía que genera la microcentral es ciento por ciento libre de emisiones contaminantes.
Al respecto, Dominik Plata Gröber, alumno que encabezó el proyecto, especificó que el corazón de la microcentral hidroeléctrica es una turbomaquinaria basada en los conceptos de una turbina tipo Michell-Banki y el sistema de regulación de agua diseñado por la Organización Latinoamericana de Energía (Olade), ideas que él y sus compañeros estudiantes adaptaron técnicamente a las necesidades específicas de la granja, y considerando el flujo del caudal del río.
Como la microcentral puede producir 8.7 veces la electricidad que la Granja Integral Autosustentable San Miguel Modín requiere para operar, en el futuro, el excedente de energía se empleará para alimentar una pequeña fábrica de azúcar mascabado -en la actualidad inexistente-, que bajo un esquema de comercio justo producirán de manera ecológica los habitantes de Tzimol, comunidad cañera con altos índice de pobreza.
Cabe resaltar que la microcentral fue financiada por la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, por medio de su Coordinación de Ingeniería Mecánica y Eléctrica; la Granja Integral Autosustentable San Miguel Modín; y Mauricio Salgado, exprofesor de la Ibero y director general en América Latina de Eberspächer, empresa alemana de sistemas de control climático que realizó donaciones en especie al proyecto, así como asesoría técnica.