A finales del 2019 el gobierno de México presentó el Paquete Fiscal 2020, mismo que incluyó modificaciones a la Ley de Ingresos y a la Ley del IVA, por lo que se incorporaron impuestos a los productos digitales entre los que destacan los servicios educativos en línea.
Con los cambios realizados al Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA), propuestas hechas por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público y aprobadas por las Cámaras de Diputados y Senadores, a partir del pasado 1 de junio del 2020, las empresas que presten servicios educativos a través de plataformas digitales están sujetas al pago de estos gravámenes.
Desde el 1 de junio, diversos servicios en línea tales como las plataformas de streaming (Netflix), videojuegos (Play Station de Sony), de viajes personales (Uber y DiDi) han sido afectadas por la medida del 16% de impuestos, aunque es cierto que algunas de las marcas lo han resuelto de distinta manera, al absorber dicha cuota para no afectar a sus consumidores.
Por su parte, las empresas de entretenimiento y juegos de azar (casinos y casas de apuestas online) están en la mira de Morena en el Senado de la República para una posible renovación de la ley de juegos y sorteos, esto con el objetivo de que el gobierno recupere la facultad para establecer impuestos y establecer los nuevos esquemas para aumentar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), mismo que actualmente es del 20% para los casinos y se busca que el servicio en línea tenga un régimen especial ante el aumento en la popularidad de estos sitios.
A primera vista, la situación del impuesto a la educación en línea puede parecer una condicionante para el aprendizaje en México, sin embargo, la realidad es que e busca no provocar una “inequidad” horizontal con escuelas que ofrecen su servicio de manera presencial y que sí pagan impuestos.
“En el IVA, la educación que no cuenta con validez oficial o acreditaciones está gravada, es decir las clases de inglés, las clases de danza, esas están gravadas. Con el ánimo de tener piso parejo, los cursos que van en esa dirección, que no tienen detrás una validez oficial, tendrían que estar gravadas, si no sería una cuestión de inequidad horizontal”, expresó Francisco Javier Arias, jefe de la Unidad de Política de Ingresos Tributarios de la Secretaria de Hacienda.
Respecto al tema, el especialista en derecho de las telecomunicaciones, Agustín Ramírez, brindó una entrevista al diario El Economista, donde dejó claro que no se trata de que se grave a educación como tal, sino es una cuestión que engloba a todos los comercios brindados a través de una plataforma en línea.
“Si lo centramos en un concepto como la educación digital estaríamos distorsionando el concepto de gravamen. Es al consumo en general, porque es un principio general de la tributación. El propio texto constitucional señala que todos los mexicanos tenemos la obligación de contribuir a los gastos públicos y hay dos formas de contribuir: a través de tus ingresos, cuando generas una ganancia, y a través del consumo, cada que compras un producto”, explicó.
Por otro lado, el abogado fiscalista de González Araujo Consultores, explicó en una entrevista con el portal Expansión que, la mayoría de los cursos ya estaban gravados, sin embargo, la regulación se hace principalmente ante las empresas extranjeras.
“La mayoría de estos cursos ya estaban gravados cuando estaban fuera de una plataforma, lo que pasó fue que se abarcó más en las plataformas extranjeras que prestan servicios en el país, tienen fuente de riqueza en el país, pero no tributan aquí. Sin embargo, también es cierto que la regulación será materia de muchos litigios y consultas porque se centra en los servicios prestados sin tener en cuenta las características del prestador”, comentó para el portal.
Es importante destacar que dentro de la ley tributaria quedan exentas de pago de IVA los servicios de enseñanza que preste el Estado, además de los particulares con validez oficial, es decir que las escuelas o universidades que brindan algún diplomado en línea, no van a retenerle impuestos al consumidor.
Un ejemplo es que si la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) o alguna otra escuela oficial saca alguna convocatoria para algún diplomado de titulación o cualquier otro, solamente se cobraría el costo y no habría ninguna retención de IVA o ISR.
Volverán las clases; serán en línea
Las clases regresarán pronto en México. El ciclo escolar 2020-2021 comenzará el próximo 24 de agosto, sin embargo, las clases serán a distancia al no existir las garantías y condiciones sanitarias para realizarlo de manera presencial. El secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, consideró que regresar a las aulas no es posible ni prudente.
“Todos deseamos volver a las aulas en compañía de nuestras amistades, maestros y maestros que extrañamos, sin embargo, el riesgo para salud y la vida sigue siendo alto. La realidad nos obliga a tener paciencia y prudencia o de lo contrario nos puede suceder como a Israel, Corea de Sur, Reino Unido y Francia, por citar algunos ejemplos, que abrieron sus escuelas y tuvieron que volver a cerrar”, expresó.
A manera de apoyo, el Gobierno de México solicitó el apoyo de las principales televisoras del país para transmitir contenido educativo, este material dependerá completamente de la Secretaría de Educación Pública.
Respecto a la decisión de comenzar el ciclo escolar de manera online, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo estimó que la medida no es viable en México, esto debido a que aproximadamente 1.4 millones de estudiantes no podrán regresar a clases.
De acuerdo con el informe realizado, los cierres largos en las escuelas conllevan una alta posibilidad de deserción escolar de los estudiantes más pobres, esto con base en las experiencias de Sierra Leona tras el ébola o de Nueva Orleans, luego del huracán Katrina.
Por si fuera poco, las estrategias de la Secretaría de Educación Pública no pueden llegar a todos los estudiantes, pues solamente el 44.3% de los hogares cuentan con un equipo de computo y el 56.4% con conexión a internet.
“En el ámbito rural, las cifras son considerablemente menores: 20.6% y 23.4% de los hogares cuentan con computadora y con conexión a Internet, respectivamente. Asimismo, las diferencias en materia de posesión de una computadora y de acceso a Internet son muy pronunciadas. Mientras que casi nueve de cada 10 hogares del nivel socioeconómico alto cuentan con conexión a Internet, solo dos de cada 10 hogares del estrato bajo cuentan con conexión”, se puede leer en el documento.