La formación que actualmente están adquiriendo los estudiantes de las escuelas normales, no corresponde a las necesidades, ni a las actuales demandas sociales, según se ha reconocido en el Plan Nacional de Desarrollo, sostuvo el especialista de la UNAM, Andrés Lozano Medina durante su conferencia magistral en la inauguración del foro de consulta región tres, celebrado en la ciudad de Guanajuato; donde subrayó que si es preciso cambiar el actual modelo educativo que se brinda en las escuelas normales, se debe a esta falta de concordancia entre las exigencias de las escuelas de educación básica y lo que se enseña en las escuelas formadoras de maestros.
Aún más, a pesar de que se pueden reconocer avances en la capacitación y actualización de los docentes, hasta el momento no hay elementos suficientes para señalar que la oferta brindada ha sido pertinente para los profesores y directivos, “no existe evidencia de su impacto en la transformación de las prácticas de enseñanza”, subrayó Lozano Medina.
Por ello, resulta primordial pensar bien qué se hará con los estudiantes que ahora se están formando con un modelo educativo que, como la propia Secretaría de Educación Pública (SEP) ha reconocido, no responde a las necesidades ni exigencias que demanda la sociedad actual, cuestionó el académico.
Se trata de individuos, con unos conocimientos y una formación que tendrá que ser reforzados; y cuya problemática se tiene que debatir ampliamente, planteó el académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Con respecto al modelo educativo que tendrían que adoptar las escuelas normales, el investigador Lozano Medina, señaló que los “perfiles, parámetros y lineamientos del servicio profesional docente” son una avanzada propuesta sobre le rumbo a tomar con respecto al normalismo, pues estos definen lo que se espera de un buen maestro.
Presente en el evento, la investigadora de la Universidad La Salle, María Bertha Fortoul Ollivier; reconoció que muchos maestros podrían señalar que una de las debilidades de las normales, tiene que ver con la formación emocional, con un enfoque “socioafectivo”.
Los docentes no cuentan con las herramientas para enfrentar problemáticas como el estrés o problemas con alumnos que asumen comportamientos o actitudes que complican el proceso de enseñanza-aprendizaje, enfatizó la investigadora.
“Los maestros tiene que enfrentar actitudes y comportamientos en sus alumnos, los cuales no tolerarían de un amigo”, pero con ese alumno tendrán que convivir al menos 200 días, por ello es importante reforzar las habilidades emocionales dirigidas a los maestros, abundó la maestra Fortoul Ollivier.
Fernando Serrano Migallón, subsecretario de Educación Superior, aseguró que las normales en todo el país se fortalecerán, pues la preparación de los maestros “cobra mayor importancia a partir de la Ley General del Servicio Profesional Docente que establece norma claras de ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia del magisterio únicamente por sus méritos”.