Con el ánimo de revalorar la profesión docente, el investigador de El Colegio de México (Colmex) Manuel Gil Antón, director académico de Educación Futura, criticó la expresión popular que dice: “el que sabe hace y el que no, enseña”, por lo cual en una vuelta de tuerca, el académico aseguró que más bien “el que sabe hace, y el que enseña sabe porque se hace lo que se hace, es decir, entiende”, dijo durante el seminario “La reforma educativa en México”, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM.
En su exposición, Manuel Gil Antón, resaltó que lo que hace a un buen docente es que este “conozca la pedagogía de los contenidos que enseña”, hasta lograr que los infantes mexicanos, luego de cursar su educación básica, puedan llegar a decir “ya entendí”; con lo anterior, se podrá apartar la idea de que la profesión docente es algo sencillo y que cualquiera puede hacer.
Gil Antón planteó que si no se hace una evaluación que responda a la complejidad que encierra la enseñanza, se terminará valorando únicamente lo medible y se pasarán por alto todos aquellos “valores intangibles” que hacen que una persona logre adquirir la capacidad para aprender a lo largo de la vida.
El INEE, un debate sobre sus funciones
En la mesa tres del seminario sobre la Reforma Educativa, realizado en la máxima casa de estudios, el investigador de la UNAM y ex secretario de Educación del DF, Axel Didriksson, elaboró una dura crítica a la reforma educativa, a la cual calificó como reforma laboral, así como una crítica a la utilidad de la autonomía del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).
En los lineamientos para el ingreso de servicio profesional docente que publicó el INEE en enero pasado, se asegura que será la Secretaría de Educación Pública (SEP) quien determinará los métodos e instrumentos para dar entrada al sistema educativo, a los maestros de nuevo ingreso, postuló Didriksson.
Corresponderá también a la SEP realizar el proceso de calificación de la información obtenida, la forma en la que se publicarán los resultados y los perfiles de los docentes, entre otra serie de atribuciones que dejan en el aire la pregunta: ¿y el INEE? Uno pensaría que la autonomía del Instituto serviría para tener una mayor injerencia, dijo.
Backhoff, responde
unque en la mesa tres, donde participó el consejero del INEE, Eduardo Backhoff, ya no dio tiempo de que realizara una replica a los planteamientos de Didriksson, entrevistado al término del encuentro, el consejero de este Instituto -creado en el sexenio de Vicente Fox-, señaló que los planteamientos del ex secretario del DF, “son incorrectos”.
En la Ley General de Servicio Profesional Docente, a la que se refirió Didriksson, se establece que es la SEP y las autoridades educativas locales quienes tienen la responsabilidad de evaluar sí, pero bajo los lineamientos que prevea el INEE, con respecto al ingreso, permanencia y promoción de los docentes, puntualizó Backhoff.
De este modo, la autonomía constitucional del INEE servirá para supervisar que tanto la SEP como las autoridades educativas de los estados, realicen este proceso correctamente, en lo que corresponde a la nueva LGSPD, aseguró el consejero del INEE.
En lo que corresponde a la evaluación del Sistema Educativo Nacional (SEN), eso lo hará el INEE “solito”, con base en una ley que le ha dado autonomía para ello, concluyó Backhoff Escudero.