En el arranque del primer foro regional para la revisión del modelo educativo, en la mesa con el tema “¿Cómo garantizar la inclusión y la equidad en la escuela básica?”, se presentaron 45 ponencias donde los participantes, en su mayoría docentes, compartieron su experiencia sobre los retos que representa el aprendizaje en un contexto de bilingüismo, diversidad, vulnerabilidad, y discapacidades o capacidades diferentes.
En su mayor parte, lo que los maestros expresaron fueron las buenas prácticas que se realizan en el aula, con una búsqueda de proyección de mayores dimensiones, por ejemplo, el maestro Javier Crisóstomo Deolarte, para generar escuelas incluyentes y con sentido de equidad, propuso realizar una sensibilización a través de “capacitación docente” y hacer que la escuela se adapte al alumno y no el alumno al maestro.
Consciente de que la Educación Inicial (EI) es una de las principales igualadoras sociales en el desarrollo de las personas, la maestra Laura Burguett García, quien se desempeña en un Centro de Desarrollo Infantil del DF, propuso reforzar la EI, así como realizar una campaña a nivel nacional para informar a la población sobre la importancia de este tipo de formación temprana.
Por su parte, el maestro César Estrada López, echando mano de la teoría de la educación, planteó que la forma de garantizar la equidad y la inclusión en el sistema educativo, es al considerar y aplicar que “no hay educación de calidad si no es intercultural”.
La maestra María Esther Basurto, expuso la necesidad del sistema educativo mexicano de contemplar la diversidad como una “riqueza” con la meta de que cada maestro llegue a mirar a cada alumno como diferente; para ello además del trabajo en el aula, propuso un trabajo cultural en medios masivos de comunicación, a través de una campaña nacional.
De este modo los maestros dejaron ver que la equidad y la inclusión son fundamentales en el sano desempeño del sistema educativo. De acuerdo con el INEGI, en la ciudad de México -sede inaugural de estos foros de consulta que pasan revista al modelo educativo de nuestro país-, existen 31 mil niños que padecen algún tipo de discapacidad, lo que representa el 1.6% de la población infantil; y hay poco más de 6 mil infantes que hablan alguna lengua indígena.