Durante 2025, la mayoría de las universidades públicas enfrentarán retos mayúsculos en materia económica.
Este 15 de noviembre, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ha entregado al Cámara de Diputados el Paquete Económico para 2025, donde se aprecia una disminución general de 10,268 millones de pesos para las instituciones de educación superior, respecto al año pasado.
Salvo el Organismo Coordinador de las Universidades Benito Juárez, quien presentaría un aumento de más de 1452.3 millones de pesos, las demás instituciones presentan reducciones importantes. De manera general, se reduce 9.16% respecto al año pasado, es decir, más de 10,268 millones de pesos.
Con esta propuesta, las universidades más castigadas son: Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) con -14.12%, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con -10.63%, la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) con -8.16% y El Colegio de México con -6.04%.
Por otro lado, las Universidades Benito Juárez reciben un aumento de 92.94% y se contempla la designación de presupuesto a la Universidad de las Lenguas Indígenas de México, la cual se anunció el año pasado.
Con estos recortes, significan recortes a programas fundamentales para el quehacer de las universidades: la desaparición de facto del programa de becas Elisa Acuña en algunas instituciones, la imposibilidad de concluir obras, así como “una caída real y significativa en el monto destinado al pago de salarios del personal académico y administrativo” (UAM 2024) y “para la actualización de programas académicos y desarrollo de la investigación y la difusión de la cultura” (UNAM 2024)
Estos ajustes presupuestales ponen en riesgo la capacidad de las universidades públicas para cumplir con su misión fundamental de ofrecer educación de calidad, promover la investigación y contribuir al desarrollo cultural del país. Frente a este panorama, es indispensable abrir un diálogo amplio y constructivo entre las instituciones educativas, los legisladores y el gobierno federal para garantizar que los recursos destinados a la educación superior sean suficientes, equitativos y alineados con las necesidades estratégicas de México. El fortalecimiento de las universidades públicas no solo es una inversión en el futuro del país, sino una condición esencial para reducir desigualdades, fomentar la innovación y consolidar un desarrollo sostenible e inclusivo.