Juan Carlos Miranda Arroyo
La SEP ha sido una institución que ha contado con liderazgos diversos, contrastantes y controvertidos.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) del Gobierno Federal cumple cien años. En estas fechas de 1921 se decretó su creación como dependencia del gabinete oficial y como institución nacional, del poder ejecutivo federal, responsable de los destinos de la educación pública del país.
Antes de tener su actual nombre, la institución se denominaba: “Secretaría de Instrucción Pública y Bellas Artes”.
La SEP nació como una institución que se encargaría de hacer llegar la educación pública a todas las comunidades del país. Es importante mencionar que durante sus inicios como tal, don José Vasconcelos, primer titular de la dependencia, creó las misiones culturales, que eran unos centros de educación y capacitación, cuyos maestras y maestros ofrecían formación en artes y oficios a miles de jóvenes de todas las pequeñas localidades de la república mexicana.
Aunque Vasconcelos ocupó el cargo durante 3 años, dio un impulso importante a las tareas educativas nacionales y para sentar las bases de lo que hoy conocemos como “sistema” educativo mexicano” (SEM). “En 1920, el Presidente Álvaro Obregón lo nombró rector de la Universidad Nacional, a la cual dotó del escudo y lema que se conservan hasta nuestros días. En octubre de ese mismo año, publicó su proyecto de Ley para la creación de la SEP que implicaba una reforma constitucional, misma que defendió duramente frente a quienes se oponían a ella. Una vez firmado el decreto de creación de la Secretaría de Educación Pública por el Presidente Obregón, Vasconcelos fue nombrado al frente de la institución el 22 de octubre de 1921. Desde la SEP, se dedicó a luchar contra el analfabetismo, impulsó la escuela rural, implementó la difusión de las bibliotecas, apoyó el desarrollo de las bellas artes, impulsó la educación media, inició la edición de libros de texto gratuitos y se repartieron desayunos escolares entre la población infantil.” (1)
Quizá una de las imágenes más familiares para mexicanas y mexicanos, con respecto a la SEP, son el emblema y letra de la institución a través de los libros de texto gratuitos, editados por la Comisión Nacional del mismo nombre, que fue creada para su diseño, impresión y distribución, en 1959.
La SEP ha sido una institución que ha sido dirigida por liderazgos diversos, contrastantes y controvertidos. Lo mismo ilustrados que ajenos a las tareas culturales y educativas. Por sus pasillos y oficinas centrales, en la CDMX, han pasado políticos, científicos, escritores, médicos y amigos o amigas del presidente en turno.
Desde los primeros bocetos de institucionalidad educativa promovidos por Narciso Bassols (1931-1932); o por los precursores del proyecto de educación socialista durante el gobierno de Lázaro Cárdenas (1934-1940), con Ignacio García Téllez (1934-1935); Gonzalo Vázquez Vela (1935-1939); e Ignacio M. Beteta (1939-1940); hasta otras épocas más discretas, cuando la SEP fue dirigida por personajes como: Jaime Torres Bodet, durante dos períodos (1943-1946 y 1958-1964), o el también escritor Agustín Yáñez (1964-1970).
Durante este siglo de vida institucional, entre los/las secretarios y secretarias de la SEP, hay perfiles más políticos que académicos o intelectuales como son los casos de Víctor Bravo Ahuja (1970-1976); Porfirio Muñoz Ledo (1976-1977) y don Jesús Reyes Heroles (1982-1985).
Por su parte, Fernando Solana Morales (1977-1982 y 1993-1994), fue un personaje más identificado con un perfil universitario pues, antes de ser secretario de la SEP, fue alto funcionario de la UNAM (Secretario General). Específicamente, durante el conflicto de 1968, trabajó con el rector universitario, Ing. Javier Barros Sierra.
En el gobierno de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) cuatro personajes sobresalientes de la vida política y económica del país se integraron al gabinete oficial y ocuparon las oficinas de las calles de Argentina. Me refiero a los secretarios Manuel Bartlett Díaz (1988-1992); Ernesto Zedillo Ponce de León (1992-1993), secretario de la SEP que después fue presidente de la república; el mencionado Fernando Solana Morales (1993-1994), quien junto con Torres Bodet y Vasconcelos, fue titular de la oficina de la educación pública federal en dos ocasiones; y José Ángel Pescador Osuna (1994), quizá el primer maestro de formación en ocupar el cargo.
Uno de los titulares de la SEP que ha contado con reconocimientos importantes, como personaje que logró dar los equilibrios necesarios en negociaciones con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y que permitió dar una importante consolidación al sistema educativo mexicano, con sus claros y oscuros, fue Miguel Limón Rojas (1995-2000).
Con Vicente Fox como presidente de la república, el titular de la SEP fue Reyes Tamez Guerra (2000-2006), quien antes había sido rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) los tres titulares de la dependencia eran ajenos, en su trayectoria pública, a los círculos intelectuales, académicos o magisteriales más significativos del país: Josefina Vázquez Mota (2006-2009); Alonso Lujambio Irazábal (2009-2012); y el médico José Ángel Córdova Villalobos (2012).
En lo más reciente, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) ocuparon el cargo Emilio Chuayffet Chemor (2012-2015); con perfil político; Aurelio Nuño Mayer (2015-2017), amigo del presidente y sin contar con una amplia trayectoria en las áreas científicas o intelectuales del país. Y Otto Granados Roldán (2017-2018), ex colaborador de Reyes Heroles y Carlos Salinas de Gortari.
Como sabemos, durante el gobierno actual del presidente López Obrador, Esteban Moctezuma Barragán (2018 – 2021), ex colaborador de Ernesto Zedillo; y Delfina Gómez Álvarez (feb.-mar. de 2021, a la fecha), han ocupado el cargo. Ésta última, maestra normalista de formación profesional.
La vida institucional de la SEP a lo largo de estos cien años ha estado marcada por momentos de luz pero también de sombras. Ello no depende necesariamente de la personalidad o trayectoria de la o el titular del ramo. Quizá uno de los momentos más sombríos de la dependencia se dio durante el gobierno de Calderón, cuando éste entregó prácticamente la rectoría de la educación a la dirigencia magisterial, encabezada por Elba Esther Gordillo. En esa etapa, las direcciones generales de la SEP estaban ocupadas por líderes sindicales.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) que es responsable de la administración federal de la educación en México, tiene a su cargo la definición de planes y programas de estudios de la educación básica y media superior; así como la orientación y dirección de las instituciones formadoras de docentes (educación docente inicial), y de los procesos claves de la formación continua y profesional de las y los docentes, junto con directivos y asesores escolares, en servicio. Todos éstos representan, sin duda, procesos significativos para avanzar en el objetivo de transformar el sistema educativo mexicano.
Ciertamente, la SEP es una institución compleja y de gran tamaño, porque dirige y coordina a una cantidad importante de dependencias educativas, culturales, deportivas, de comunicación y sociales de diverso tipo. Debido a ello, es motivo de investigaciones y de observaciones críticas. Por esas razones, la SEP, y por sus funciones, atribuciones y responsabilidades, es la dependencia del gobierno federal que maneja el presupuesto más grande entre las dependencias de gobierno. Esto está principalmente centralizado para pagar la nómina magisterial (de más de un millón 200 mil trabajadoras y trabajadores).
Por ello y por todo lo que significa para la educación pública de niñas, niños, jóvenes y adultos en nuestro país, hay que decir: Felicidades por tu cumple, SEP. Ojalá que esta institución cumpla muchos años más, en la noble labor de servir a la nación y asegurar el derecho a la educación de tod@s l@s mexicanas y mexicanos.
Fuente consultada:
(1) Tomado de la Historia de la SEP. Sitio oficial de la SEP, en internet. (2014).
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