México requiere de un sistema de educación superior capaz de enfrentar los desafíos de este siglo e identificar las oportunidades que le permitan contribuir de manera eficaz al logro de la equidad y la inclusión, como factores del desarrollo humano, afirmó el doctor Salvador Vega y León, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), al participar como ponente en el Aniversario 70 de El Colegio Nacional.
Durante la conferencia titulada Problemas de la educación en México, el rector general se refirió al contexto en que la educación superior realiza sus tareas, al señalar que la economía ha experimentado una marcada desaceleración e incluso se encuentra al borde de la recesión.
Una de las consecuencias de esta problemática, sostuvo, es la estrechez financiera que presionará hacia la baja los subsidios a las universidades públicas del país.
Los primeros informes sobre los presupuestos que cada universidad tendrá en el próximo año muestran que el crecimiento no satisfará las expectativas de las instituciones de educación superior; esto llevará a una situación complicada, que hará difícil el cumplimiento de los objetivos que en sus planes de desarrollo cada institución se ha planteado.
Señaló que hoy tenemos un país con una desigualdad que si bien no crece de manera exponencial, sí se mantiene y sigue siendo la misma desde hace tiempo al afectar a poco menos de 50 por ciento de la población.
Lo anterior, indicó, establece una desigualdad en las familias mexicanas que trae como consecuencia un fenómeno respecto al acceso a la educación superior, el cual se da fundamentalmente a partir del ingreso de los individuos.
En este contexto es posible prever las dificultades que los jóvenes tendrán no sólo para ingresar, sino para mantenerse dentro de las universidades públicas y privadas del país, puntualizó.
Al referirse a los problemas de la matrícula, el rector general de la UAM subrayó que la mayoría de los jóvenes busca matricularse en las instituciones públicas de prestigio, en las cuales la disponibilidad de espacios no es suficiente.
Señaló que para lograr la meta propuesta por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies) de alcanzar una cobertura de 60 por ciento (actualmente de 33 por ciento) para el año 2022, será necesaria una adición anual de 2.7 puntos a la tasa de cobertura. Esto llevaría a tener que ampliar la matrícula de 3.3 millones a 5 millones 570 mil adicionales a los registrados en el ciclo 2011-2012.
Expuso que para 2014 el gobierno tiene programado un presupuesto de 289 mil 972.2 millones de pesos para el sector educativo, “pero aún es insuficiente”, porque es un financiamiento que sólo servirá para cubrir los incrementos salariales.
Advirtió que los recortes presupuestales a las instituciones públicas y la proliferación de esquemas beca-crédito, préstamos, deducción de impuestos por pago de inscripción y colegiaturas, llevarán a un tema “inevitable” que es pagar por estudiar, lo que resulta “lacerante” para la población del país que no cuenta con suficientes recursos.
En esta mesa de análisis participó también el doctor Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien hizo un detallado análisis de la educación superior mexicana en el contexto internacional.