El titular del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed), Héctor Gutiérrez de la Garza, reconoció que la instalación de aulas móviles es un elemento que se debe erradicar en el sistema educativo, pues en la mayoría de los casos no brindan las condiciones necesarias para que los menores puedan permanecer en ellas.
Mediante un comunicado, el funcionario detalló que el problema realmente comienza cuando “la instalación provisional de un aula móvil se convierte en permanente, y lejos de garantizar un espacio óptimo para estudiar representa un riesgo para los alumnos por el poco espacio, por la falta de ventilación, las condiciones generales en sí del aula móvil.”
La instalación de aulas móviles es una práctica recurrente, porque la autoridad se ve rebasada en la demanda de espacios educativos.
Sin embargo, dijo, uno de los objetivo del Programa Escuelas al CIEN de la Secretaría de Educación Pública (SEP) es terminar con estas aulas móviles, por lo que se hace un “gran esfuerzo por dotar de escuelas dignas a las niñas, niños y jóvenes de México.”
En diversos sitios del país, directivos escolares han denunciado que la instalación de aulas móviles es cada vez más recurrente, pues se han sobrepasado los cupos límite de cada escuela.
Estas aulas, construidas de material ligero, no presentan las condiciones necesarias para los niños y docentes, pues presentan alta concentración de temperatura, poca ventilación y espacio para el desarrollo integral de tareas.