En la actualidad, en América Latina se registra un fenómeno de juvenicidio invisibilizado, advirtió el doctor Pablo Vommaro, académico de la Universidad de Buenos Aires, Argentina (UBA).
Durante el encuentro internacional temático: Formación para la crítica y territorializaciones de paz, efectuado en la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el investigador resaltó que los jóvenes de las clases sociales desfavorecidas se desarrollan en ambientes de extrema violencia que provocan incluso su desaparición.
El especialista recordó que el mexicano José Manuel Valenzuela fue el primero en hablar de juvenicidio relacionado con precarización, pobreza, desigualdad, estigmatización y estereotipo, mientras que el también investigador argentino Raúl Zaffaroni califica de genocidio por goteo la problemática juvenil.
Durante su ponencia Territorios, juventudes y resistencias: configuraciones generacionales, disputas por lo público y espacios para la paz, instó a erradicar el discurso que presenta a los jóvenes como víctimas y sobre todo como victimarios responsables de decesos violentos, pues es un recurso utilizado por las fuerzas de seguridad para justificar la represión contra ese sector de la de población.
El también director del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales resaltó que la Unicef planteó en un estudio reciente que en Brasil sólo uno por ciento de las muertes violentas es causado por menores de 18 años, dato que desmiente la tendencia a culpabilizar de la violencia a los jóvenes.
“Noventa y nueve por ciento de los delitos violentos es responsabilidad de los adultos, pero es más fácil culpar a la juventud”.