Como “una buena noticia” considera la investigadora Blanca Heredia el nombramiento de Aurelio Nuño al frente de la Secretaría de Educación Pública, a quien le reconoce una enorme capacidad intelectual y política, además su cercanía a la presidencia “refrenda el compromiso del presidente Peña de mantener la prioridad en la reforma educativa”.
La académica del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) opina que Nuño “ha tenido una participación muy destacada en los asuntos estratégicos del gobierno”, ademas posee una importante capacidad de negociación política “que sigue siendo un aspecto crucial en la parte de educación pública, con actores muy poderosos, con intereses muy importantes, que hay que estar continuamente gestionando, poniendo de acuerdo, junto con una gran capacidad técnica, misma que mostró durante el periodo de transición cuando estuvo a cargo del área educativa”.
Reconoce que aunque quizá no tenga toda la experiencia administrativa “no hay que olvidarnos que un secretario tienen la función de marcar la dirección, motivar y generar los acuerdos internamente y externamente”, mientras que para la operación cotidiana contará con el apoyo de importantes subsecretarios.
La especialista en temas de educación y crecimiento económico considera que el trabajo de Emilio Chuayffet en la SEP fue muy importante pues “sacó toda la parte de operación política, con problemas y retos que tuvo que resolver”.
Para la Coordinadora del Programa Interdisciplinario sobre Política y Prácticas Educativas, lo más importante para el nuevo Secretario, será:
“establecer un vinculo de comunicación e interlocución directa con los maestros, la reforma, en particular, la evaluación del desempeño docente, tanto el ingreso como la permanencia, en los casos de docentes y directivos, ha generado mucha inquietud entre la base magisterial y en algunos casos rechazo abierto, creo que no ha sido posible, todavía, lograr convencer a los maestros de las bondades que la evaluación supone para ellos, en términos de darles certeza con respecto a que su mérito profesional, no cualquier otra cosa, es lo que va a determinar su acceso a una plaza y su permanencia en la misma”.
La Doctora en Ciencia Política, por la Universidad de Columbia, reconoce la necesidad de un programa serio, con recursos incluidos, para la capacitación y profesionalización. Y añade un segundo elemento:
“Yo no alcanzo a saber cuál es la brújula de la reforma educativa, en la parte de contenidos concretos, tenemos avances enormes en instrumentos y cambios en las reglas del juego, pero no acaba de quedar claro cual es el objetivo en términos de ¿qué queremos del sistema educativo, qué tipo de aprendizajes, qué tipos de personas queremos formar y para qué?”
Para Heredia hay mucho temas importantes, entre los que se encuentra el planteamiento de metas concretas “en términos de mejoras en algunos ámbitos, el caso de calidad, de la transición al empleo, es una tarea muy complicada”.