Actualmente, las Universidades Interculturales atienden a poco más de 14 mil jóvenes en todo el país, y más del 75% de ellos, son la primera generación de su familia y de su comunidad que va a una universidad.
Los 12 planteles ubicados en Sinaloa, San Luis Potosí, Michoacán, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Puebla, Tabasco, Quintana Roo, Chiapas y Veracruz, imparten carreras que tienen un amplio sentido social y vinculación con la comunidad, señaló Fernando Salmerón Castro, Coordinador General de Educación Intercultural y Bilingüe de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Entre la principales carreras, destacan: Desarrollo Sustentable; Lengua y Cultura; Turismo Sustentable; Comunicación Intercultural; Ingeniería forestal y Energía; Enfermería Intercultural; Salud Intercultural; Medicina, que tiene como requisito para ingresar que el alumno sea bilingüe, Derecho Intercultural, y Gestión Municipal.
Además, se busca implementar una carrera de Economía Solidaria, con énfasis en la formación de empresas comunitarias.
Para Salmerón Castro, este modelo ha sido exitoso, porque la interculturalidad va más allá de la multiculturalidad.
En México pensábamos que era un país mestizo, producto de una mezcla virtuosa que tendía a la homogeneidad, y no es así. Nos hemos dado cuenta de que es una diversidad que sigue presente, incluso el México mestizo es muy diverso, somos mestizos muy distintos.
Otra tarea, dijo, es mejorar las condiciones de acceso, la calidad y la oferta de la educación que se imparte en las regiones indígenas, y por ello se han desarrollado propuestas de modelos educativos para secundaria, bachillerato y universidad, ya que no estaba siendo atendida.
“De esta forma, al bachillerato intercultural pueden asistir personas de comunidades indígenas y no indígenas. No son escuelas bilingües, en el sentido de que no toda la educación que ahí se imparte es en legua indígena, pero sí se promueve que aprendan la lengua cuando no la saben o alcancen mejores niveles de dominio”, concluyó.