“Una sociedad que no respeta, no tiene consideración y no ama a sus maestros, es una sociedad sin futuro. Las sociedades que más aman a sus maestros, son las que más han crecido”, afirmó Luis Fernando Vílchez Martín, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid.
Vílchez agregó que los maestros deben ser bien remunerados, primero, porque cada uno es digno de recibir una buena compensación por su trabajo; y en segundo lugar, porque es una manera de ser socialmente respetado.
Si una persona gana poco, significa que le damos poca importancia a su trabajo, pareciendo que tiene poco valor.
En entrevista con Educación Futura, Vílchez Martín señaló que el papel de los profesores debe cambiar y adaptarse a las nuevas herramientas tecnológicas.
El maestro es imprescindible. El maestro debe cambiar, está cambiando. Debe ser un acompañante de la vida de los estudiantes, y se debe adaptar a las herramientas que sus condiciones le presentan
El experto advirtió que aunque el libro de texto sigue siendo importante en la educación, existen muchas otras fuentes de conocimiento que se deben aprovechar en el aula, sin embargo, reconoce, esto representa un arma de doble filo; pues así como existe un sinfín de conocimiento proporcionado por el internet, también hay grandes cantidades de desinformación, y es ahí donde los docentes deben hacer una fuerte acompañamiento y servir de guías a los alumnos, para que estos, generen sus propios conocimientos.
Ante ello, señala, muchos alumnos han rebasado a los profesores en el uso de estas nuevas tecnologías. Sin embargo, aunque el profesor no está obligado a saber manejar los últimos inventos tecnológicos, debe saberlas utilizar de manera educativa. Aunque debe saber los mínimos indispensables para manejar estas herramientas, su enfoque debe ser muy pedagógico, expone.
Incluso deben cambiarse las paredes de la escuela, debe existir una reforma estructural para que estas nuevas tecnologías entren correctamente en el ámbito educativo, y al mismo tiempo, se les debe brindar una capacitación correcta a los profesores para que esto pueda ser posible.
Advirtió que para que una escuela sea de calidad, debe ser, en primer lugar equitativa, pues consideró que sin esta característica se pueden descubrir y aprovechar los nuevos talentos.
Finamente, sobre el bullying señaló que este es un tema muy complejo, pues es un problema que se ha reproducido desde hace muchos años, sin embargo, ahora se ha vuelto más evidente, pues herramientas como el internet o las redes sociales han hecho que esto sea más viral y llegue a más personas.
Vílchez acudió a México a participar en el Foro de Escuelas Católicas organizado por Ediciones SM.